¿Qué es el análisis espacial?

El análisis espacial es un término general que cubre una amplia gama de procesos en muchas industrias diferentes. En general, estas diversas áreas tienen algo en común; se basan en técnicas y tecnologías que miden la forma relativa, la distancia y la posición de los objetos. Por ejemplo, en cartografía, el análisis espacial se relaciona con la ubicación de las ciudades y los límites de las carreteras, pero en la ingeniería eléctrica, ayuda a determinar la distancia del flujo de energía y la posición de los circuitos. Incluso con todos estos diversos significados, uno de los usos más comunes del análisis espacial se relaciona con la geografía y los sistemas de información geográfica.

La ciencia del análisis espacial probablemente se originó con la creación de mapas hace miles de años. Esta primera variedad de análisis era rudimentaria e inexacta. A medida que mejoraron varias otras ciencias, esta ciencia también mejoró. Uno de los avances más importantes se produjo a través de mejoras en geometría y matemáticas. Cuando la ciencia espacial se combinó con las matemáticas, la precisión mejoró drásticamente.

El análisis espacial todavía se rige por las matemáticas en la actualidad. La gran mayoría de las técnicas de análisis modernas se basan en modelos matemáticos y estadísticos. Estas técnicas utilizan valores numéricos conocidos para trazar probables progresiones. Estas progresiones se trazan en un sistema especial, que crea una forma espacial relativa. Este esquema, si todo funcionó correctamente, se aproxima a un diseño tridimensional de la vida real.

En casi todas las ramas de la ciencia, la ingeniería y la fabricación se utiliza alguna forma de análisis espacial. Las técnicas de esta ciencia se utilizan siempre que la posición relativa de los objetos es importante para un proceso. Por ejemplo, la ubicación de una máquina en una planta de fabricación, el tamaño de una pieza en el motor de un automóvil o el efecto que tiene la distancia en la reproducción de la planta se basan en esta ciencia.

Si bien estos procesos son importantes para muchos campos, son fundamentales para las ciencias geográficas. La geografía se basa en comparar las distancias entre las características de la tierra, tanto naturales como artificiales. Los mapas, un subproducto natural del estudio de la geografía, son uno de los modelos espaciales más simples disponibles.

A medida que la geografía, la cartografía y las computadoras se combinaron, surgió el sistema de información geográfica (SIG). Las bases de datos GIS son uno de los proyectos de análisis espacial más grandes jamás realizados. Estas bases de datos contienen coordenadas tridimensionales de millones de objetos y ubicaciones.
Usando estos puntos de datos conocidos, es posible encontrar la posición relativa de casi cualquier cosa en la Tierra. Estos puntos de datos proporcionan más que coordenadas. Con un modelo matemático básico, es posible extrapolar direcciones y ubicaciones. Esta forma de análisis espacial tiene un impacto directo en la vida diaria de los usuarios a través de los sistemas de navegación y posicionamiento global.