Una entrevista simulada es una forma de prepararse para una entrevista de trabajo. Por lo general, implica una consulta y una entrevista práctica con un entrenador profesional. Puede implicar ensayar diferentes tipos de entrevistas o escenarios, con el fin de preparar a un buscador de trabajo para diversas situaciones potenciales. Además de aprender a responder preguntas, los candidatos generalmente reciben consejos generales para aumentar su confianza en sí mismos. Muchos colegios y universidades ofrecen servicios de entrevistas simuladas a través de sus oficinas de orientación profesional, mientras que otros entrenadores profesionales de entrevistas suelen trabajar para empresas privadas.
El propósito de realizar una entrevista simulada generalmente es presentar preguntas estándar y ayudar al candidato a responderlas con confianza. Uno de los principales beneficios de participar en una entrevista simulada es la disponibilidad de comentarios y críticas constructivas. Esto puede ayudar a reducir el nerviosismo del entrevistado y aumentar su sensación de estar bien preparado.
Dado que las entrevistas grupales son una práctica de contratación común en muchas empresas, una o más personas pueden dirigir la entrevista simulada. Con frecuencia, los entrenadores graban la sesión y luego la revisan con el candidato. Como resultado, la persona puede identificar sus puntos problemáticos y practicar varias veces para hacer mejoras antes de la entrevista de trabajo real.
Los tipos de preguntas formuladas en una entrevista simulada generalmente incluyen aquellas que requieren conocimiento del campo o posición. También pueden implicar preguntas conductuales o situacionales, que pueden evaluar cómo una persona puede manejar varios desafíos. Durante una entrevista simulada, generalmente se espera que los candidatos a puestos de trabajo hagan preguntas pertinentes sobre el empleador, para demostrar que han realizado su investigación sobre el puesto.
En general, el objetivo de una entrevista simulada no es solo hacer y responder preguntas, sino también aprender a entrevistar. Las entrevistas exitosas usualmente incluyen usar vestimenta apropiada y practicar una etiqueta profesional aceptable. Un ejemplo es demostrar un lenguaje corporal positivo, como mantener el contacto visual con el entrevistador. En la mayoría de las entrevistas, también es importante actuar con confianza y articular claramente su currículum.
Algunos entrenadores de entrevistas ofrecen servicios adicionales, como asesorar a un candidato sobre cómo proceder después de una entrevista de trabajo. Las sugerencias en esta situación pueden incluir enviar al entrevistador una nota de agradecimiento y hacer llamadas telefónicas con preguntas de seguimiento. Los entrenadores también pueden tener recomendaciones con respecto a la negociación de pago y otros detalles, si finalmente se contrata a uno para el puesto.