Para convertirse en ingeniero de instalaciones, es necesario tener al menos una licenciatura en ingeniería o experiencia equivalente en el trabajo, junto con un conocimiento de los códigos regionales de construcción y seguridad. Los ingenieros de instalaciones diseñan, construyen y mantienen edificios y sistemas que se utilizan en actividades comerciales como la fabricación o que se utilizan para albergar grandes organizaciones, agencias y empresas. Este trabajo puede ser bastante variado, y las buenas habilidades con las personas son muy beneficiosas para las personas interesadas en carreras en este campo.
La forma tradicional de convertirse en ingeniero de instalaciones es obtener una licenciatura en ingeniería o un campo relacionado, con un enfoque en áreas temáticas que son relevantes para el diseño y mantenimiento de las instalaciones. Es posible que los estudiantes quieran considerar pasantías por experiencia laboral y por la posibilidad de conexiones profesionales. Pueden optar por doble especialización para una mayor profundidad de conocimiento o pueden considerar la escuela de posgrado para una formación avanzada en ingeniería.
Los graduados universitarios deberán conocer los códigos de construcción antes de poder trabajar en este campo. Un estudiante que planea ser ingeniero de instalaciones podría comenzar a leer la documentación del código temprano para desarrollar un conocimiento profundo. Los códigos pueden variar según la región, y si alguien no sabe dónde quiere trabajar, esa persona podría considerar estudiar libros de códigos nacionales para obtener una visión general. Algunos colegios y universidades también ofrecen clases que cubren específicamente códigos de construcción y temas relacionados.
Otra opción es adquirir experiencia laboral en el campo. Una persona puede convertirse en ingeniero de instalaciones trabajando en un departamento de mantenimiento para desarrollar habilidades y experiencia. Con el tiempo, la familiaridad con varios sistemas utilizados en una instalación puede convertirse en una gran profundidad de conocimiento y la capacidad de mantener y reparar estos sistemas. La experiencia en el trabajo también puede familiarizar a los trabajadores con los códigos de construcción y los problemas de seguridad que pueden surgir en el lugar de trabajo. Algunos empleadores pueden aceptar a alguien que quiera convertirse en ingeniero de instalaciones si ese solicitante tiene una experiencia laboral sustancial, incluso si él o ella no tiene un título universitario.
No importa qué camino elija alguien para convertirse en ingeniero de instalaciones, la educación continua es una buena idea. Las conferencias, las publicaciones comerciales y los cursos pueden ayudar a las personas a mantenerse al día con los cambios en los códigos de construcción, así como con las normas y prácticas generalmente aceptadas en la industria. También puede ser útil unirse a una organización profesional con fines de creación de redes, así como acceder a contenido exclusivo para miembros, como capacitaciones especializadas. La membresía profesional puede ser útil en las solicitudes de empleo, especialmente cuando se combina con una sólida experiencia en el campo.