La amilosa es una mol?cula que se encuentra en algunos alimentos y es un componente del almid?n. La amilasa, por otro lado, es una enzima que descompone el almid?n en pedazos m?s peque?os. Como el almid?n es una fuente importante de energ?a en el cuerpo humano, la interacci?n entre la amilasa y la amilosa juega un papel ?til en el metabolismo de los alimentos. Las fuentes de amilosa incluyen papas, pasta y pan, y el cuerpo produce amilasa de forma natural en la saliva y en los jugos pancre?ticos.
El almid?n es una forma de carbohidrato, y est? presente en una variedad de plantas. Como el almid?n contiene energ?a ?til para el metabolismo, a los animales y microbios les gusta comer alimentos con almid?n. B?sicamente, el almid?n es una colecci?n de mol?culas de glucosa unidas entre s?, y los cient?ficos dividen el almid?n en dos tipos de colecciones de glucosa, que son amilosa y amilopectina.
La amilopectina es una mol?cula de subunidad grande, que contiene hasta aproximadamente 2 millones de mol?culas de glucosa. Se compone de arreglos de aproximadamente 30 unidades de glucosa unidas entre s? con enlaces espec?ficos llamados enlaces glucos?dicos alfa (1-4). Cada una de estas peque?as agrupaciones est? unida por enlaces glicos?dicos alfa (1-6).
Aunque son mucho m?s peque?as que la amilopectina, las subunidades de amilosa a?n contienen mol?culas de glucosa hasta un m?ximo de aproximadamente 20,000 glucosas por amilosa. Estas mol?culas se mantienen unidas por enlaces glicos?dicos alfa (1-4). Cada amilosa es una cadena lineal de glucosas, que se dobla en forma de h?lice, mientras que la amilopectina es una cadena con ramas.
Cada uno de los enlaces que mantienen unidas las mol?culas de almid?n contiene energ?a, y los animales y los microbios pueden usar esta energ?a para mantener sus propios cuerpos en funcionamiento. Con el tiempo, la evoluci?n hizo que este tipo de organismos desarrollaran la capacidad de descomponer la amilosa para alcanzar esta energ?a. Todos los animales que comen almid?n producen amilasa en el p?ncreas, y algunos tambi?n la producen en las gl?ndulas salivales. En el caso de los humanos, las interacciones de amilasa y amilosa comienzan en la boca cuando los alimentos se exponen a la saliva, y la descomposici?n enzim?tica contin?a cuando la enzima se libera desde el p?ncreas hacia la primera parte del intestino delgado despu?s de que los alimentos pasan por el est?mago.
La interacci?n espec?fica entre amilasa y amilosa ocurre porque la enzima solo corta los enlaces glicos?dicos alfa (1-4). No puede cortar los enlaces glicos?dicos alfa (1-6). Despu?s de que el almid?n se expone a la amilasa, por lo tanto, la enzima descompone el almid?n en enlaces espec?ficos, cortando la amilosa y la amilopectina en trozos peque?os. Estas piezas resultan ser maltosa, maltotriosa y dextrinas limitantes que contienen dos, tres y aproximadamente cinco glucosas cada una. Solo las dextrinas l?mite contienen las ramas de enlace glucos?dico alfa (1-6) que se originaron en la amilopectina, mientras que los otros dos productos de descomposici?n est?n estructurados en cadenas lineales.
Una vez que la amilasa y la amilosa han entrado en contacto y la enzima ha cumplido su funci?n, otro conjunto de enzimas se hace cargo. Estas enzimas se denominan complejo sacarasa-isomaltasa, y descomponen la maltosa, la maltotriosa y limitan las dextrinas en unidades individuales de glucosa. Las glucosas luego se mueven hacia el cuerpo y se utilizan para obtener energ?a en los procesos celulares.