Un pólipo de las cuerdas vocales es un crecimiento no canceroso similar a una ampolla en las cuerdas vocales. Uno puede aparecer solo, o varios pueden crecer en ambos cordones al mismo tiempo. Se diferencian de los nódulos de las cuerdas vocales en que los nódulos son duros y los pólipos son blandos. Los pólipos aparecen como áreas inflamadas, crecimientos en forma de tallo o lesiones que se asemejan a ampollas. La causa principal de los pólipos es el abuso de la voz. Cantantes, actores de teatro y entrenadores deportivos son ejemplos de personas con un mayor riesgo de desarrollar pólipos en las cuerdas vocales.
Los síntomas de pólipos y nódulos son similares e incluyen una voz ronca que dura más de dos o tres semanas. La voz también puede volverse áspera. Sentir un nudo en la garganta o dolores punzantes en los oídos también son signos de la presencia de pólipos en las cuerdas vocales. El primer signo de pólipos para los cantantes profesionales es a menudo un rango de tono de voz disminuido durante la interpretación. La fatiga general es otro síntoma posible.
Si no se trata, un pólipo vocal eventualmente se convierte en un nódulo en las cuerdas vocales. Los nódulos son duros y se sienten como callos. El tratamiento de los pólipos de las cuerdas vocales evita que se conviertan en nódulos más difíciles de tratar.
El diagnóstico se realiza mediante un examen realizado por un profesional médico, generalmente un otorrinolaringólogo, que se especializa en enfermedades de la nariz, los oídos y la garganta. Este examen generalmente implica examinar visualmente las cuerdas vocales con un endoscopio. También se puede solicitar una evaluación por parte de un especialista en habla y lenguaje. En algunos casos, se incluye un examen neurológico. El equipo de evaluación estudia los resultados de la prueba para hacer el diagnóstico.
El tratamiento generalmente comienza con el reposo de las cuerdas vocales. Se pueden recetar medicamentos para tratar los factores contribuyentes, como la enfermedad por reflujo gastroesofágico o las alergias. El entrenamiento conductual de la voz para eliminar el abuso futuro es otra opción de tratamiento. En los casos en que estos métodos no funcionan, se realiza una cirugía para extirpar los pólipos. Una combinación de intervención médica, conductual y, si es necesaria, quirúrgica trata de manera eficaz la mayoría de los pólipos de las cuerdas vocales.
La mayoría de los pólipos de las cuerdas vocales son benignos, pero en raras ocasiones pueden volverse cancerosos. Cuando se extirpa quirúrgicamente un pólipo de las cuerdas vocales, se envía a un examen de biopsia para determinar si es maligno. Si es así, se deriva al paciente a un oncólogo para su evaluación y cualquier tratamiento necesario. Se recomienda una visita a un profesional médico siempre que se noten cambios en la voz durante más de dos semanas, se desarrolla dolor de oído o cuello, o aparecen otros síntomas de un pólipo en las cuerdas vocales.