La arteritis temporal es una afección que provoca la inflamación de las arterias medianas y grandes de la cabeza. La afección se denomina así porque la inflamación afecta predominantemente a las grandes arterias que recubren las sienes de la cabeza. Cuando las arterias grandes en otras partes del cuerpo, como el cuello, se inflaman, la afección se conoce como arteritis de células gigantes. La arteritis temporal puede volverse muy grave si no se trata adecuadamente. Una persona que muestre signos de la afección debe buscar atención médica lo antes posible.
Las causas de la arteritis temporal no se han identificado claramente. A veces, puede coincidir con otra condición de salud. Un ejemplo de esto pueden ser las personas con polimialgia reumática. Este es un trastorno que causa inflamación y rigidez en la parte superior de los brazos, el cuello, las caderas y los hombros. Por lo general, las personas con arteritis temporal desarrollarán este trastorno y las personas con polimialgia reumática pueden desarrollar esta condición de inflamación de las arterias.
El dolor de cabeza severo es generalmente el síntoma más frecuente de esta afección. El dolor de cabeza puede presentar una sensación dolorosa o punzante que puede aparecer en ambas sienes o solo en una. Algunas personas también experimentarán sensibilidad en el cuero cabelludo. El malestar de la cabeza puede ser tan grave que a la persona le puede resultar difícil acostarse, especialmente de lado.
A menudo, cualquier tipo de movimiento facial será doloroso para una persona con arteritis temporal. Los movimientos faciales como bostezar, masticar y hablar repetidamente pueden resultar difíciles. Otros síntomas de la arteritis temporal pueden incluir visión doble o borrosa, dolor y rigidez muscular y pérdida de peso. A veces, los síntomas se asemejan a los de un resfriado común. En estas circunstancias, una persona puede experimentar fatiga, fiebre y pérdida de apetito.
Se puede realizar una biopsia de arteritis temporal para un diagnóstico adecuado. Durante una biopsia, un médico generalmente extirpará una sección de una arteria sospechosa para examinarla en busca de inflamación. Por lo general, se usa anestesia local para el procedimiento. También se pueden usar otras pruebas de diagnóstico, como una tomografía computarizada (TC), un análisis de sangre y una resonancia magnética (MRI) para diagnosticar esta afección.
El tratamiento de la arteritis temporal generalmente implicará la toma de corticosteroides. Estos medicamentos se administran con frecuencia para tratar la inflamación. Debido a las complicaciones potencialmente graves, será importante que el tratamiento comience tan pronto como se descubra la afección. Algunas de las complicaciones más graves de este tipo de inflamación de las arterias pueden ser un derrame cerebral o un aneurisma aórtico. Cualquiera de estos problemas de salud graves puede provocar parálisis, ceguera y, a veces, la muerte, por lo tanto, el tratamiento médico inmediato es extremadamente importante con esta afección.