¿Cuáles son los signos de una reacción alérgica al sol?

Una reacción alérgica al sol puede adoptar varias formas, según el tipo de alergia solar presente. La dermatitis actínica crónica causa parches de piel inflamada, seca y con picazón e imita otra afección de la piel conocida como dermatitis de contacto. La erupción de luz polimórfica es un tipo de reacción alérgica a la luz solar que hace que se desarrollen pequeñas protuberancias con picazón en las áreas expuestas de la piel. La urticaria solar puede causar la formación de ampollas y urticaria, incluso en áreas de piel cubiertas por ropa. Otro tipo de reacción alérgica se llama prurigo actínico y se desarrollan protuberancias llenas de líquido, que afectan principalmente a niños y adultos jóvenes.

Un tipo de reacción alérgica al sol conocida como dermatitis actínica crónica normalmente se presenta de manera similar a la dermatitis de contacto, una condición de la piel que se desarrolla como resultado del contacto directo con un alérgeno. Los síntomas pueden incluir varios parches de piel inflamada y engrosada que pueden estar secos y con picazón. Si se ven afectadas grandes áreas de piel, puede haber áreas más pequeñas de piel dentro del área más grande que parecen no estar afectadas.

Erupción de luz polimórfica, también conocida como PMLE, es el nombre que se le da a un tipo específico de reacción alérgica al sol. En cuestión de minutos a horas de exposición al sol, la piel puede comenzar a picar y formar pequeñas protuberancias blancas o amarillas, generalmente sobre un parche de piel enrojecida. Esta condición se conoce con frecuencia como intoxicación solar y es el tipo más común de alergia al sol.

La urticaria solar, otro tipo de reacción alérgica al sol, hace que los síntomas se desarrollen en cuestión de minutos después de la exposición al sol. Los síntomas típicamente incluyen picazón en la piel, desarrollo de urticaria y ampollas dolorosas. A diferencia de otros tipos de alergia al sol, la urticaria solar puede afectar las áreas expuestas de la piel, así como las que están cubiertas por la ropa. Los síntomas asociados con este tipo de alergia al sol generalmente desaparecen una hora después de terminar la exposición al sol.

El prurigo actínico es un tipo de alergia al sol que se encuentra con mayor frecuencia en niños y adultos jóvenes. En esta condición, las áreas afectadas de la piel se enrojecen, se elevan y pican. Se pueden formar ampollas en cualquier área del cuerpo, incluidas las áreas que no han estado en contacto directo con el sol. Las ampollas asociadas con este tipo de reacción alérgica al sol pueden romperse y, en casos graves, pueden aparecer cicatrices permanentes.