La hinchazón en una pierna suele ser el resultado de un coágulo que bloquea el flujo sanguíneo, una lesión en la pierna de una persona o una inflamación por afecciones artríticas. También hay algunos casos en los que la hinchazón en una pierna puede ser causada por la retención de agua, lo que podría indicar una falla orgánica importante. En la mayoría de los casos, la hinchazón en una sola pierna no es tan grave como dos piernas hinchadas, pero si la única pierna está hinchada debido a un coágulo de sangre, puede ser muy grave, al igual que la hinchazón por retención de agua en los raros casos en que solo afecta a una pierna.
En una situación típica, la hinchazón en una pierna generalmente significa que el problema está centrado de alguna manera dentro de esa pierna. Eso podría ser potencialmente algo bueno o malo. Por lo general, una pierna hinchada es solo un signo de lesión. Si una persona se lastima la pierna al tirarse de un músculo o al caerse y lastimarse, un poco de hinchazón se puede considerar normal.
En muchos casos, la hinchazón en una pierna también puede ser causada por artritis en la articulación de la rodilla o el tobillo. Esta es una afección grave que puede resultar debilitante si no se trata. La artritis puede causar un daño severo con el tiempo porque puede corroer el cartílago de una persona, lo que puede hacer que sea cada vez más difícil para alguien moverse. El dolor artrítico en las rodillas, los tobillos y las caderas es especialmente grave porque puede limitar la movilidad.
Otra causa grave de hinchazón en una pierna es un coágulo de sangre dentro de la pierna. En ocasiones, esto provocará muchos otros síntomas, como dolor y una notable falta de sensibilidad o flujo sanguíneo en esa pierna. En otros casos, puede ser más sutil y difícil de detectar. En cualquier situación, el coágulo de sangre puede poner en peligro la vida. El peligro principal es la posibilidad de que el coágulo de sangre se desprenda y dañe otro órgano principal mientras viaja por el torrente sanguíneo.
La retención de agua es una de las causas más comunes de piernas hinchadas, pero generalmente hace que ambas piernas se hinchen. A veces puede haber una hinchazón levemente desigual, con una pierna notablemente más grande que la otra. Cuando eso sucede, una persona puede pensar que solo una de sus piernas está hinchada porque se ve así a simple vista. La retención de agua puede ser un peligro grave porque la insuficiencia renal, cardíaca y hepática son todas las posibles causas. En general, se considera prudente consultar a un médico para asegurarse de que no haya retención de agua o un coágulo si hay una hinchazón significativa en las piernas.