¿Qué es la biolixiviación?

La biolixiviación es el uso de microorganismos bacterianos para extraer metales preciosos, como el oro, del mineral en el que está incrustado. Como alternativa a la fundición o tostado, los mineros utilizan la biolixiviación cuando hay concentraciones más bajas de metal en el mineral y necesitan un método eficiente y ambientalmente responsable para extraerlo. La bacteria se alimenta de nutrientes en minerales, separando así el metal del mineral. Otros metales que se extraen comúnmente mediante biolixiviación incluyen plata, zinc, cobre, plomo y uranio.

Utiliza microorganismos especiales

Este proceso funciona debido a la forma en que los microorganismos especiales actúan sobre los depósitos minerales. Estos microorganismos son catalizadores para acelerar los procesos naturales en el mineral. Los tipos de bacterias más utilizados en este proceso incluyen Leptospirillum ferrooxidans, Thiobacillus ferrooxidans y ciertas especies de Acidianus, Sulfolobus y Sulfobacillus.

Oxidación
Las bacterias utilizan una reacción química llamada oxidación para convertir los cristales de sulfuro metálico en sulfatos y metales puros. Estas partes constituyentes del mineral se separan en metales valiosos y azufre sobrante y otras sustancias químicas ácidas. Finalmente, se acumula suficiente material en la solución de desecho para filtrarlo y concentrarlo en metal recuperable.

Factibilidad
Para algunos tipos de metales, como el cobre, la biolixiviación no siempre es económicamente viable o lo suficientemente rápida, incluso con su bajo costo. Sin embargo, en ciertas áreas del mundo o con otros metales, este método simple, efectivo y de bajo costo se considera una opción inteligente. Por ejemplo, los países en desarrollo a menudo no tienen la infraestructura o la inversión de capital para comenzar a fundir, pero su tierra contiene suficiente mineral para que su extracción pueda mejorar significativamente sus economías nacionales. Muchos científicos creen que la biolixiviación podría usarse algún día para extraer metales como el zinc y el níquel en la luna.

Bajo impacto en el medio ambiente
A principios del siglo XXI, aproximadamente el 21% del cobre extraído en el mundo provenía de la biolixiviación. Las empresas mineras deben tener cuidado con la contaminación que podría resultar de las soluciones que llegan a una fuente de agua subterránea. Sin embargo, en general, la biolixiviación produce una cantidad relativamente pequeña de contaminación del aire y poco daño a las formaciones geológicas, porque las bacterias se encuentran allí de forma natural. Un depósito de metal ideal debe permitir que una cierta cantidad de agua penetre en la roca para transportar las bacterias. Sin embargo, debe estar rodeado de rocas que sean impermeables al agua para asegurarse de que las aguas subterráneas no se contaminen con azufre.