La teoría del prototipo es una teoría de la ciencia cognitiva desarrollada por Eleanor Rosch a principios de la década de 1970, con la ayuda de otros expertos en el campo de la psicología cognitiva. En la teoría de Rosch, las personas categorizan elementos y conceptos basándose en un prototipo o representación ideal de esa categoría. Por ejemplo, el concepto de perro a menudo se caracteriza por el pelaje, la cola y las patas. Cuando se habla de perros o se piensa en ellos, la gente piensa en ejemplos clásicos y estereotipados, como collies o spaniels, porque representan el prototipo. Si bien un lobo o un coyote también pueden cumplir los criterios de un perro, estos animales no son el prototipo de un perro.
Según la teoría del prototipo, ciertas características de una categoría tienen el mismo estatus y, por lo tanto, los ejemplos que representan todas o la mayoría de esas características se convierten en el prototipo de esa categoría. Los elementos que no comparten la mayoría de estas características pueden pertenecer a esa categoría, pero no representan el prototipo. Considere una categoría como muebles. Las características de los muebles incluyen madera, tapicería, asientos, capacidad de almacenamiento, piernas y brazos, entre muchas otras.
Para algunas personas, las sillas pueden ser un prototipo porque estos muebles tienen la mayoría de las características comunes de los muebles. Un reposapiés, por otro lado, puede no servir como prototipo porque, si bien tiene algunas características comunes de mobiliario, no tiene la mayoría de esas características. La forma en que cada persona aplica la teoría del prototipo para categorizar conceptos y lenguaje varía según la experiencia y el desarrollo cognitivo, aunque muchas personas comparten categorizaciones similares.
Principalmente, la teoría del prototipo se ocupa de cómo los individuos categorizan y estereotipan ciertos elementos en el lenguaje. Estos conocimientos ayudan a los psicólogos a comprender y estudiar la adquisición de vocabulario, léxicos mentales individuales y el desarrollo de habilidades lingüísticas en los individuos. Los entornos de enseñanza, como las escuelas primarias, se benefician de dicha investigación y comprensión al desarrollar planes de estudio para los estudiantes. Comprender cómo la mente categoriza y clasifica la información, así como cómo ese proceso se ve afectado por el desarrollo cognitivo, la cultura y las experiencias de aprendizaje temprano, ayuda a ayudar a los estudiantes a ganar vocabulario y desarrollar habilidades lingüísticas más avanzadas.
Según la teoría del prototipo, los expertos creen que la primera experiencia de una persona con un estímulo particular define más tarde el prototipo asociado con esa categoría de estímulos. A medida que se adquieren experiencias y una persona está más expuesta a una categoría en particular, el prototipo evoluciona hacia una representación central para esa categoría. Para decirlo en términos simples, la primera experiencia de un niño con un pájaro podría ser un petirrojo y, por lo tanto, el prototipo del niño para los pájaros se convierte en un petirrojo. A través de la experiencia y la exposición a otras aves, su prototipo llega a representar criaturas con plumas, picos y la capacidad de volar, y puede comenzar a incluir más aves como arrendajos azules, águilas y petirrojos. Un avestruz o un pingüino aún se pueden clasificar como ave, pero debido a que estas especies no vuelan, no son un ejemplo representativo cuando el niño inicialmente habla de aves.