Las bacterias son microbios, típicamente de 0.0000196 a 0.00019 pulgadas (0.5 a 5.0 micrómetros) de longitud, que se pueden encontrar en grandes cantidades en todas las partes del medio ambiente, desde al menos 2 millas (3.2 km) bajo tierra hasta 7 millas (11.2 km) por encima. La superficie de la tierra. Colonizan áreas inhabitables para la mayoría de las otras formas de vida, incluidas las aguas termales de Yellowstone y los valles secos de McMurdo en la Antártida.
Los seres humanos también tienen una gran cantidad de bacterias dentro y fuera de sus cuerpos. Se estima que hay unas diez bacterias por cada célula del cuerpo humano, para un total de aproximadamente 1 billón (1015) de microbios, distribuidos entre 500 a 100,000 especies. La gran mayoría vive en el intestino grueso, aunque se pueden encontrar en todo el cuerpo. Algunas de las bacterias del cuerpo son buenas, como el Lactobacillus, que convierte la proteína de la leche en ácido láctico en el intestino, y algunas son malas, como las responsables de las caries y las úlceras de estómago.
Las bacterias se encuentran en suelos fértiles en grandes cantidades: alrededor de 100 millones a 3 mil millones por 0.035 onzas (1 gramo) de suelo, a veces con hasta un millón de especies en esa pequeña muestra. Aunque una muestra de suelo típica está dominada por solo unas pocas especies, hay un gran número presente pero en baja abundancia. Ayudan a otros organismos a descomponer los detritos orgánicos, creando un suelo rico. En particular, las bacterias son la única forma de vida capaz de convertir el nitrógeno atmosférico en nitrógeno fijo (sólido), en forma de nitratos que luego son utilizados por las plantas como nutrientes.
Si hay material orgánico presente o incluso, en algunos casos, compuestos inorgánicos reducidos, entonces las bacterias, en cooperación con otros microorganismos, probablemente encontrarán alguna forma de digerirlo. Hay especies que consumen trozos de llanta al costado de la carretera, disuelven placas de Alzheimer en cadáveres e incluso consumen TNT o minerales de sulfato. El uso de bacterias u otros microbios para descomponer sustancias químicas tóxicas se denomina biorremediación.