¿Cuáles son los diferentes tipos de medicamentos para el colesterol?

Hay cuatro tipos diferentes de medicamentos para el colesterol. Estos incluyen estatinas, niacina, resinas de ácidos biliares y derivados del ácido fíbrico. Cada uno funciona de forma diferente para tratar el colesterol alto. En muchos casos, a los pacientes se les prescribe más de un fármaco, o más de un tipo de fármaco, para lograr los resultados deseados.
Las estatinas bloquean la producción de colesterol en el hígado. Estos medicamentos son la primera línea de defensa para tratar el colesterol alto. Reducen las lipoproteínas de baja densidad (LDL) o colesterol «malo» y aumentan levemente las lipoproteínas de alta densidad (HDL) o colesterol «bueno». También son eficaces para reducir los niveles de triglicéridos. Los efectos secundarios de las estatinas incluyen problemas intestinales, daño hepático y, en casos raros, debilidad muscular.

La niacina es un complejo de vitamina B que se encuentra en los alimentos y en niveles más altos por prescripción médica. Reduce eficazmente el colesterol LDL y aumenta el colesterol HDL. La niacina obtenida de suplementos o fuentes alimenticias no debe usarse para tratar el colesterol alto. Solo un profesional médico calificado puede recetar la cantidad adecuada de niacina de forma individual. Las fórmulas de venta libre también están disponibles, pero solo deben usarse bajo la supervisión de un médico. Los efectos secundarios de la niacina incluyen picazón, hormigueo, rubor y dolor de cabeza.

Las resinas de ácidos biliares son medicamentos recetados que disminuyen los niveles de colesterol LDL y total. Se unen a la bilis en los intestinos, donde evitan que sea absorbida por el sistema circulatorio. La bilis está compuesta principalmente de colesterol y las resinas de ácidos biliares actúan limitando el suministro general del cuerpo.

Los efectos secundarios de estos medicamentos incluyen malestar estomacal, estreñimiento y gases. También pueden interferir con la absorción de algunas vitaminas y otros medicamentos por parte del cuerpo. Es necesario informar a un médico sobre todos los medicamentos y suplementos de venta libre y recetados antes de tomar resinas de ácidos biliares.

Los derivados del ácido fíbrico, también conocidos como fibratos, se utilizan para reducir el colesterol LDL y los triglicéridos, al tiempo que aumentan el colesterol HDL. La ciencia no está clara sobre cómo funciona este medicamento para el colesterol. Se cree que los fibratos aumentan la descomposición de las partículas de triglicéridos, disminuyen la producción de lipoproteínas y simultáneamente inducen la creación de nuevas partículas de HDL en el cuerpo.

Los efectos secundarios de los derivados del ácido fíbrico incluyen malestar estomacal, cansancio, náuseas, vómitos, mareos, dolor de cabeza y visión borrosa. Los fibratos pueden interactuar con otros medicamentos para el colesterol, como las estatinas, provocando degradación muscular y posible daño renal. Pueden ocurrir otras interacciones en pacientes que toman anticoagulantes como warfarina, lo que provoca un sangrado excesivo.