¿Qué es una manta polar?

Una manta de vellón es una manta aislante hecha de una mezcla de tela sintética. El término “vellón” a menudo causa confusión, porque a veces se usa para describir parte de la lana de oveja. En este contexto, sin embargo, se refiere a un tejido de poliéster específico sin ningún contenido de lana. El vellón polar es el tipo más conocido, aunque hay varias variedades disponibles.

La tela de este tipo de manta se hace tomando hilo de poliéster y retorciéndolo con fuerza. Luego, el material resultante se cepilla con alambre áspero para apretarlo y elevar un poco la superficie, luego se corta para nivelar todo. Prácticamente todos los tipos de mantas de vellón están fabricados con un tejido de alta calidad conocido como no pastilla, que no se hincha después de lavarse varias veces. En general, la textura de la superficie de este material es mejor que la de otros tipos de vellón.

Las buenas mantas pueden venir en una amplia gama de texturas, cada una procesada de manera ligeramente diferente. El lado superior puede ser casi liso o puede tener una agradable sensación de terciopelo, mientras que el lado inferior suele ser incluso más liso, con una textura muy parecida al fieltro. Muchas personas hacen sus propias mantas debido a la facilidad de usar el vellón como material “sin costuras”. A los principiantes a menudo les gusta esta tela porque nunca se deshace como lo hacen la mayoría de los demás, lo que hace que sea difícil de arruinar.

Hay tres categorías principales de peso de vellón que se pueden usar en una manta, dependiendo de qué tan caliente quiere el fabricante que esté el producto final. Los micropolares son los más ligeros y no son adecuados para nada más que una manta ligera destinada a usarse debajo de una más pesada. Los vellones de peso cien son la siguiente categoría de peso y son tan pesados ​​como un par de pantalones deportivos promedio. Los vellones de peso medio se usan a menudo para chaquetas y chalecos, y son ideales para una manta que se usa en condiciones de frío.

El vellón es un gran material para las mantas debido a su excelente relación peso-aislamiento. Es suave y cómodo, retiene bien el calor y es lo suficientemente liviano como para llevarlo en viajes de mochilero o guardarlo fácilmente en un armario. En situaciones de campamento, el poliéster ayuda a eliminar la humedad y mantiene a los campistas más secos que otros materiales de manta. Aunque quizás no sea tan ideal como algunas alternativas de alta tecnología, el vellón ofrece muchos beneficios por un precio bajo.