El césped de traspatio ha evolucionado mucho desde las dos últimas décadas del siglo XX. Muchas empresas diferentes crean e instalan céspedes de patio trasero, pero solo hay unos pocos tipos diferentes de césped de patio trasero que se fabrican actualmente. El nailon o el polietileno son los dos materiales principales que se utilizan para fabricar césped artificial. Estas fibras se pueden colorear, cortar y diseñar para que se parezcan a una variedad de pastos naturales, que suele ser la forma en que las personas eligen entre los céspedes de jardín. La base del césped artificial se puede llenar con agua, arena o una mezcla de ambos.
La principal diferencia entre los tipos de césped de patio trasero es si las hojas de césped artificial están hechas de fibras de nailon o polietileno. El césped de nailon ya no es tan común porque el tinte verde necesario para que el césped artificial parezca real no se adhiere bien a una superficie de nailon. El tratamiento del césped de nailon con plomo permite que se absorba el tinte verde, pero deja un residuo que puede representar un peligro para la salud.
Aunque el césped de patio trasero más antiguo puede estar hecho de nailon, los céspedes más nuevos no suelen estar hechos de este material. Los céspedes de polietileno, a diferencia de los hechos de nailon, se pueden teñir fácilmente sin el uso de productos químicos nocivos. Estos céspedes también se pueden reciclar cuando ya no se necesitan, aunque no son biodegradables, ya que están hechos de materiales sintéticos.
En términos de estética, hay muchas opciones diferentes disponibles. Las fibras de polietileno y nailon se pueden cortar y colorear para que se parezcan a cualquier especie de césped popular. Las cuchillas se pueden cortar para que sean muy cortas, lo que hace que el césped sea ideal para el putt, o se pueden dejar más largas para que se parezcan mejor a un césped vivo. Tradicionalmente, los céspedes se hacen en tonos de verde, aunque las fibras se pueden teñir de cualquier color.
Las hojas de fibras artificiales vienen unidas a una base, lo que facilita la instalación del césped. Esta base se puede rellenar con arena, lo que crea una superficie firme para el césped o el agua, lo que le da una sensación más suave, más parecida a la del césped real. También es posible encontrar bases que sean una mezcla de arena y agua, lo que permite a los compradores personalizar la firmeza del césped del patio trasero. Las bases llenas de arena no requieren mantenimiento, pero las a base de agua sí necesitan ser regadas como lo hacen los céspedes normales. Las bases hechas de una mezcla requieren menos riego, pero deben mantenerse húmedas para que los materiales del césped no se dañen.