¿Qué es un detector de gas por infrarrojos?

Un detector de gas infrarrojo utiliza radiación infrarroja (IR) para detectar la presencia de gases en la atmósfera. Cada gas tiene su propia huella de infrarrojos. Eso significa que absorbe luz de una frecuencia o longitud de onda IR específica, una propiedad que la hace identificable cuando se usa el detector apropiado.
Los detectores de gas, en general, indican la existencia de gases específicos en el entorno y miden sus concentraciones. Se utilizan principalmente en la detección de fugas de gases peligrosos y concentraciones que superan los límites de seguridad, y cuando este es el caso, activan algún tipo de alarma. Un cierto tipo, el detector de gas infrarrojo, utiliza radiación infrarroja para identificar la presencia de peligros potenciales en el entorno cercano.

Los componentes principales del detector de gas infrarrojo son los siguientes: una fuente de radiación IR, que puede ser una luz incandescente regular, también conocida como transmisor; Sensores o receptores de infrarrojos; filtros espectrales selectivos que se colocan delante de los sensores; y una cámara de medición donde se difunde la muestra de gas. El espacio entre el transmisor y el receptor es el camino óptico. El haz de luz debe viajar a través de este espacio para que el sistema realice una medición.

En términos simples, la fuente de luz emitirá luz que cubre una pequeña región del espectro infrarrojo, y el gas dentro de la cámara de medición absorberá una frecuencia específica o característica de longitud de onda de su estructura molecular. La longitud de onda absorbida es única para cada compuesto y esta propiedad se utiliza para identificarlo. La cantidad de radiación absorbida es una medida directa de la concentración de gas dentro de la cámara.

Hay dos variaciones principales del detector de gas infrarrojo convencional. En el primero, el sistema utiliza dos haces de la misma longitud de onda en la región IR del espectro electromagnético que derivan de la misma fuente. Uno se utiliza como haz de referencia y el otro pasa a través del volumen de gas. Ambos haces viajarán a lo largo de diferentes trayectorias ópticas y, una vez que los sensores hayan recibido los haces, el sistema realizará el análisis necesario.

En la segunda variación, el sistema utiliza dos haces de diferentes longitudes de onda. Estos rayos viajan alternativamente a lo largo de la misma trayectoria óptica. Ambas variaciones de detectores de gas infrarrojos tienen sus ventajas y desventajas, dependiendo de las necesidades del usuario.

El detector de gas infrarrojo en su forma más simple está diseñado para detectar un solo gas. También se encuentran disponibles detectores de gases múltiples más complicados. Los gases detectados pueden ser tóxicos, como el monóxido de carbono, o incluso inflamables, como el metano o el propano.