La Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos es la fuerza policial del Departamento de Seguridad Nacional responsable de monitorear los límites del país. El entrenamiento de la patrulla fronteriza para nuevos reclutas es un intenso campamento de entrenamiento de 19 semanas destinado a educar a los recién llegados en todos los aspectos del trabajo. El entrenamiento consta de cuatro partes importantes: aprender las leyes, aprender español, entrenamiento con armas de fuego y educación física. La finalización exitosa de este curso asegura que cada agente esté preparado para las demandas diarias de este desafiante trabajo.
Comprender la ley de vigilancia de la frontera de los Estados Unidos es el trabajo principal de la capacitación de la patrulla fronteriza. La preparación consiste en un curso de cuatro partes que cubre la ley de nacionalidad, la ley de inmigración, el derecho penal y la autoridad legal. Estas sesiones en el aula ayudan a los reclutas a comprender cómo identificar si un individuo es un inmigrante ilegal, cómo determinar la legalidad del estado de esa persona, cómo determinar si la persona está violando las leyes estatales o federales al cruzar la frontera y la historia detrás de varios otros casos de patrulla fronteriza. Este aspecto de la capacitación le dará al agente la perspectiva legal necesaria para llevar a cabo la ley.
Un agente de la patrulla fronteriza está estacionado a lo largo de una de las dos fronteras naturales de los Estados Unidos, la frontera con Canadá o la frontera con México. La mayoría de los canadienses pueden hablar inglés, pero el idioma nacional de México es el español, por lo que existe una posible barrera de comunicación para los agentes que trabajan en las fronteras del sur. El entrenamiento de la patrulla fronteriza evalúa la habilidad en español de un recluta, y si él o ella no puede aprobar un curso de idiomas, se requiere asistir a clases de español. El propósito de estas pruebas y clases es garantizar la capacidad de comunicación de todos los agentes, ya que muchas personas que son detenidas por los agentes de la patrulla fronteriza hablan español como lengua materna.
La educación sobre armas de fuego también es una parte importante del entrenamiento de la patrulla fronteriza. A los reclutas se les enseña cómo usar una pistola y otras armas de forma segura y precisa. Lo más importante es que a los reclutas se les inculca la comprensión del momento y la situación adecuados para sacar o usar un arma de fuego.
Finalmente, un agente de la patrulla fronteriza debe estar en óptimas condiciones físicas para monitorear las tierras a lo largo de los límites de los Estados Unidos. El entrenamiento de levantamiento de pesas y resistencia se monitorea de cerca y se inculca en cada agente futuro. Además, el cuidado físico adecuado, como comer adecuadamente, y el cuidado mental, como lidiar con el estrés, se les enseña a los reclutas durante el entrenamiento de la patrulla fronteriza.