Estudiar la Biblia se puede hacer desde varias perspectivas, y cada una de estas perspectivas tiene una metodología ideal. Por ejemplo, una persona que está estudiando la Biblia por claridad religiosa tendrá una forma muy diferente de estudiar la Biblia que una persona que lo está haciendo para obtener un título en teología. La Biblia se puede examinar como un texto completo y autónomo, o se puede ver como parte de la historia y la filosofía. Las opiniones de alguien sobre la veracidad de la Biblia también impactan cómo se debe estudiar el documento. Encontrar un grupo que comparta un interés motivado de manera similar en la Biblia puede ser muy útil para determinar cómo estudiar la Biblia.
Una cosa que es cierta en todos los programas de estudios bíblicos es que leer la Biblia es esencial. Las historias bíblicas se han transmitido y comunicado a través de los tiempos, pero en realidad leer las palabras es absolutamente necesario cuando se trata de entender la Biblia. Sin una base en el texto, ninguna interpretación de la Biblia tiene fundamento. Para los eruditos religiosos y académicos de la Biblia, se debe realizar una lectura completa y completa del documento.
Las personas que estudian la Biblia por razones religiosas a menudo encuentran útil hablar de la Biblia con otras personas de creencias similares. A veces, un funcionario religioso puede guiar la discusión, pero los grupos de discusión bíblica sin la sanción oficial también pueden ser muy productivos. En algunos casos, un grupo cuya membresía se define por un factor como la edad o el género puede ser especialmente productivo porque presumiblemente todos los miembros tienen una perspectiva compartida sobre la Biblia.
Para las personas que estudian la Biblia en un contexto académico sin ninguna creencia religiosa, uno de los mejores consejos para estudiar la Biblia es mantener las manifestaciones actuales de la fe religiosa fuera de la discusión. No todos los grupos que se hacen llamar cristianos tienen mucha relación con el texto de la Biblia, y sus interpretaciones de la Biblia no definen lo que realmente está presente en el documento. Al mantener la religión fuera de la discusión y ver lo que realmente está contenido en el documento, es posible llegar a una comprensión mucho más matizada y sin prejuicios de la Biblia.
Ciertamente, no hay una dicotomía estricta entre quienes estudian la Biblia religiosamente y quienes estudian académicamente. Ambas perspectivas, y muchas más, pueden integrarse en una comprensión completa de la Biblia. Para todos los programas de estudio, lo que es importante recordar es que el documento está abierto a una amplia gama de interpretaciones, todas las cuales merecen una amplia discusión. La Biblia es un elemento complejo para estudiar, y puede investigarse durante años sin comprenderla por completo.