Un aprendiz de contador gradualmente asume las responsabilidades de un contador de nivel medio a medida que desarrolla sus habilidades. Las principales tareas laborales incluyen ayudar con los informes financieros, gestionar el proceso de oferta del proveedor, control de gastos, gestión de proyectos financieros y auditoría. Dependiendo de las necesidades de la empresa, el alumno puede ayudar a preparar estimaciones, aportar ideas para políticas de gestión financiera, estrategias y aplicaciones de tecnología de la información. Mantener registros precisos también es una parte importante del trabajo, ya que los aprendices a menudo se encargan de registrar los recibos y gastos.
La colocación en un puesto de contador en prácticas después de completar un título universitario de dos o cuatro años puede ser el comienzo de una carrera de contabilidad. El puesto está diseñado para dar al alumno tiempo para aplicar y desarrollar su conocimiento en prácticas contables, incluido el registro de entradas y salidas de efectivo en un libro mayor. Dado que el objetivo típico es convertir al empleado en un futuro gerente o ejecutivo, un aprendiz puede ser responsable de una amplia gama de actividades de gestión financiera, como auditorías, informes financieros oficiales y control presupuestario. Los informes financieros oficiales pueden variar según el país y pueden incluir la preparación de un balance general, un estado de flujo de efectivo y un estado de resultados.
La generación de ideas para la estrategia de gestión financiera de una empresa es un proceso en el que un aprendiz de contador puede participar. A medida que gana experiencia con las políticas y prácticas actuales de la organización, puede encontrar métodos más eficientes e innovadores. Algunas compañías combinan a los alumnos con mentores que se encargan de familiarizarlos con las prácticas comerciales estándar de la empresa. En algunos casos, los mentores pueden trabajar con los alumnos para desarrollar ideas y hacer recomendaciones a la alta gerencia.
La mayoría de las organizaciones no son completamente autosuficientes y, a menudo, establecen relaciones con proveedores externos para cumplir con las operaciones comerciales. Un aprendiz de contador puede ayudar con el proceso de oferta del proveedor o proveedor, incluida la facturación, la evaluación de costos y el cumplimiento de las obligaciones de pago. Lo más probable es que ayude con las actividades de recolección y seguimiento con los proveedores con los que trabaja su organización. Parte de controlar los gastos implica cobrar los pagos atrasados y garantizar que se minimicen las cancelaciones.
El control y el diseño del presupuesto generalmente son parte de las responsabilidades laborales del aprendiz de contador. Esto a menudo implica alertar a los supervisores cuando los gastos e ingresos corren el riesgo de no cumplir con las expectativas. Cuando esto ocurre, el alumno puede proporcionar recomendaciones sobre cómo volver a encarrilar a la organización o idear estrategias para remediar la situación. En algunos casos, estas ideas pueden implicar el rediseño de procesos financieros que involucran aplicaciones de software.