Las trampas de liquidez son situaciones financieras en las que un factor que generalmente estimula la econom?a no logra la reacci?n deseada. Un ejemplo de trampa de liquidez es cuando una ca?da en las tasas de inter?s no motiva a los consumidores a comprar m?s bienes y servicios a cr?dito. La trampa tambi?n puede desarrollarse cuando la mayor?a de los activos financieros est?n atados en cuentas no l?quidas, lo que hace dif?cil o imposible convertir esos recursos no l?quidos en activos l?quidos que pueden usarse para nuevas compras o adquisiciones.
John Maynard Keynes es a menudo identificado como el inventor del concepto de una trampa de liquidez. Keynes desarroll? por primera vez esta teor?a a mediados de la Gran Depresi?n en los Estados Unidos a mediados de la d?cada de 1930. Esencialmente, Keynes se?al? los eventos de los ?ltimos a?os y se?al? c?mo los eventos que condujeron al colapso del mercado de valores de 1929 y las actitudes prevalecientes de prestamistas y prestatarios durante la Depresi?n crearon una situaci?n en la que los estimuladores econ?micos habituales no estaban creando el efecto deseado. .
Incluso cuando no se est? produciendo una depresi?n econ?mica, es posible que surja una trampa de liquidez. Cuando los consumidores sospechan que es probable que las tasas de inter?s caigan por debajo de los niveles actuales, pueden optar por evitar incurrir en nuevas deudas por un per?odo de tiempo. Esto es cierto incluso si las tasas de inter?s han ca?do recientemente. Mientras exista la expectativa de que las tasas caer?n a?n m?s, los consumidores se abstendr?n de pedir dinero prestado o realizar compras importantes.
Otro enfoque de la trampa de liquidez se centra en los prestamistas en lugar de los consumidores. Cuando los prestamistas perciben que los indicadores habituales en la econom?a monetaria apuntan hacia un aumento en los impagos de pr?stamos y cuentas de cr?dito, pueden volverse altamente selectivos al emitir nuevas deudas. Esto significa que los consumidores que normalmente pueden obtener cr?dito con relativa facilidad de repente no pueden obtener cr?dito incluso con tasas de inter?s m?s altas.
Las tasas de inter?s en las cuentas de ahorro a menudo son relativamente altas durante una trampa de liquidez, mientras que las tasas de inter?s en pr?stamos y tarjetas de cr?dito son bajas. Adem?s de sospechar que las tasas de inter?s en las cuentas de cr?dito pueden bajar, los consumidores tambi?n pueden desear desviar los activos l?quidos a las cuentas de ahorro y aprovechar el alto inter?s en esas cuentas mientras puedan. Esta combinaci?n de circunstancias motiva a?n m?s a los consumidores a ahorrar en lugar de gastar.
Inteligente de activos.