La ingesta diaria aceptable, también conocida simplemente como IDA, se refiere a la cantidad máxima de una sustancia, como un pesticida o aditivo alimentario, que una persona sana puede ingerir de los alimentos o el agua potable a largo plazo, a diario, sin ningún efecto nocivo. La IDA se mide como la masa (en miligramos) de una sustancia por kilogramo de peso corporal por día y proviene de una extensa investigación. Las sustancias en los alimentos incluyen no solo aditivos, sino también cualquier sustancia que pueda entrar en contacto con los alimentos durante el envasado y la manipulación, como recubrimientos, adhesivos y selladores.
La determinación de la IDA fue sugerida por primera vez en 1957 por el Consejo de Europa y apoyada por el Comité de Expertos de la Organización Mundial de la Alimentación y la Agricultura de las Naciones Unidas / Organización Mundial de la Salud en Aditivos Alimentarios. El propósito era establecer estándares de seguridad mundiales uniformes. Muchos organismos gubernamentales que regulan la seguridad alimentaria, incluida la Administración de Drogas y Alimentos de los EE. UU., Actualmente reconocen las normas ADI.
La ingesta diaria aceptable se establece después de las pruebas de toxicología en animales a varias dosis. Para determinar la IDA, a una sustancia se le asigna un nivel de preocupación de I, II o III. El nivel I es el riesgo estimado más bajo, mientras que las sustancias de nivel III son el riesgo estimado más alto. Las pruebas se administran en función del nivel de preocupación de la sustancia. Las sustancias de nivel III requieren pruebas más exhaustivas que las sustancias de nivel I.
Un nivel de efecto no observable se determina a partir de los resultados de la prueba. Si se determinan múltiples resultados de varios estudios, se utiliza el NOEL más bajo. Se utiliza un factor de 100 para explicar las diferencias entre humanos y animales, y para explicar los diferentes niveles de sensibilidad entre individuos.
La ingesta diaria aceptable resultante indica el nivel máximo seguro de ingestión para un adulto sano que pesa 132 libras (60 kilogramos). Se deben considerar ajustes para las personas que no se ajustan a esta categoría, como los ancianos, los enfermos, los bebés y los niños. El factor de 100 puede explicar parcialmente estas diferencias, así como las diferencias en la sensibilidad. Cabe señalar que la IDA solo determina la seguridad, no un nivel de toxicidad, y puede superarse de manera segura por períodos cortos. La IDA no debe tomarse como un número absoluto, sino como una recomendación sujeta a cambios si hay nueva información disponible.
Algunas sustancias alimenticias se consideran contaminantes. Para estas sustancias, se determina una medida separada de la ingesta diaria tolerable. Los contaminantes se consideran sustancias que no tienen razón para estar en los alimentos, a diferencia de los aditivos alimentarios, pesticidas o medicamentos veterinarios.