¿Cuál es la conexión entre la vitamina E y el cáncer?

La vitamina E, un antioxidante, se ha citado en estudios médicos como posible preventivo del cáncer. La base de las teorías sobre la vitamina E y el cáncer se basa en la capacidad de los antioxidantes para combatir el daño oxidativo del ADN, que se atribuye a causar varios tipos de cáncer. Sin embargo, ha sido difícil fundamentar las capacidades de la vitamina E para combatir el cáncer, ya que los estudios médicos han arrojado resultados contradictorios.

Gran parte de la esperanza sobre la vitamina E y el cáncer proviene de estudios en animales y de laboratorio. Algunos estudios sobre la vitamina E y el cáncer parecen indicar que los niveles bajos de vitamina E en el cuerpo pueden conducir a un mayor riesgo de cáncer. Los investigadores también han observado que los pacientes con cáncer a menudo tienen niveles bajos de vitamina E, aunque esto podría ser un efecto del cáncer o de sus tratamientos.

El Women’s Health Study, publicado en 2005, examinó los efectos de la vitamina E y el cáncer, entre otras cosas. Este estudio se inició en 1991 y no encontró evidencia de reducción del riesgo de cáncer entre las mujeres que tomaron dosis más altas de vitamina E. Las tasas de cáncer de pulmón, mama y colorrectal no se vieron afectadas por la ingesta de vitamina E. También se han realizado estudios para ver si la vitamina E podría prevenir la recurrencia del cáncer, y los resultados de estos estudios también fueron negativos.

Un estudio de 29,000 hombres fumadores que tomaron 50 miligramos de vitamina E al día tuvo resultados contradictorios. La investigación no encontró ningún efecto sobre las tasas de cáncer de pulmón. Según los resultados del estudio, las tasas de cáncer de próstata y colorrectal fueron más bajas, mientras que la incidencia de cáncer de vejiga y estómago fue más alta.

La mayoría de los suplementos de vitamina E están hechos de acetato de alfa-tocoferol. No se ha demostrado que esta forma de vitamina E tenga ningún efecto sobre las tasas de cáncer de mama. Se demostró que otra forma de vitamina E, el tocotrienol, bloquea algunas células de cáncer de mama, pero este estudio se realizó con el uso de cultivos y no se probó en humanos.

Muchos expertos creen que una dieta equilibrada puede proporcionar cantidades adecuadas de vitamina E. Otros sugieren encontrar suplementos que contengan la forma tocotrienol de la vitamina E porque se ha demostrado que inhibe el crecimiento de algunas células de cáncer de mama en un entorno de laboratorio. Estas cápsulas de vitamina E están disponibles en una variedad de fuentes.

La vitamina E se encuentra naturalmente en las plantas. Las fuentes naturales de vitamina E incluyen almendras, aguacate y brócoli. La vitamina E también se agrega a otros alimentos. Aunque la vitamina E no se puede almacenar durante más de seis semanas en el cuerpo humano, la deficiencia es rara y, por lo general, solo se encuentra en personas con afecciones genéticas.