Para los estudiantes de medicina, ¿qué significa la residencia?

La residencia médica es un programa de educación de posgrado para estudiantes de medicina que les permite perfeccionar su formación en una disciplina médica particular y practicar habilidades en un entorno del mundo real. La residencia es una parte importante de la formación de los médicos y tiene una duración de entre tres y siete años, según la especialidad. También puede ser un período muy estresante, ya que los residentes médicos tradicionalmente trabajan muchas horas en entornos a veces muy intensos.

En la escuela de medicina, un futuro médico adquiere una gran cantidad de conocimientos generales. Hacia el final de la escuela de medicina, los estudiantes generalmente realizan rotaciones para experimentar diversas especialidades médicas durante períodos cortos, generalmente unas pocas semanas. Durante estas rotaciones, los estudiantes pueden ver si una especialidad en particular es de interés. Luego, los estudiantes postulan a programas en la disciplina que les interesa. Si el programa está interesado en el estudiante, se ofrecerá una entrevista.

Después de postularse y entrevistarse para varios programas, un estudiante de medicina envía una lista clasificada de programas, mientras que los programas de residencia envían listas clasificadas de estudiantes. Estas listas se ejecutan a través de una computadora central que se supone que relaciona a los estudiantes con los programas. El objetivo del partido es que todos los estudiantes participen en un programa de entrenamiento, pero no todos los estudiantes y programas de medicina coinciden. Si este es el caso, los estudiantes se ven obligados a postularse para los puestos vacantes restantes, lo que a veces puede resultar en un cambio de campo médico.

En el primer año de residencia, un estudiante se conoce como pasante. Técnicamente, él o ella se ha calificado como médico, pero aún no se le permite ejercer. Bajo la supervisión de médicos capacitados, el estudiante aprende sobre la especialidad elegida y comienza a realizar procedimientos básicos. La formación médica es práctica y, en su último año, muchos residentes son en gran medida independientes. A algunos estudiantes se les pide que permanezcan un año más para ayudar a los residentes junior. Todos los médicos residentes están bajo la supervisión de un médico tratante.

La residencia puede ser una actividad absorbente, ya que los residentes están constantemente de guardia y se espera que trabajen muchas horas, a veces agotadoras. Las reformas en la forma en que se manejaban los programas de residencia se llevaron a cabo a fines del siglo XX, debido a la preocupación de que la falta de sueño tuviera un impacto negativo en la capacidad de funcionamiento de los residentes. Después de completar la residencia, un estudiante es elegible para tomar los exámenes de la junta de calificación. Un pase exitoso permite al residente convertirse en un médico de pleno derecho, con licencia para ejercer en el estado o provincia donde se realizaron los exámenes.