Un dolor de cabeza por hipertensión se describe como un dolor localizado cerca de la coronilla de la cabeza, generalmente más severo por la mañana y disminuyendo por la tarde. Los miembros del público en general suelen asociar un dolor de cabeza por hipertensión con la presión arterial alta, pero de ninguna manera es un síntoma de la enfermedad. Aunque algunas personas experimentan dolores de cabeza con hipertensión, no hay evidencia concreta que relacione los dos. Amplios estudios médicos han demostrado que los dolores de cabeza por hipertensión suelen estar relacionados con otros factores, como el estrés, la ansiedad y diferentes problemas de salud.
La hipertensión es una afección común en la que las venas que llevan la sangre desde el corazón a las arterias se contraen, lo que hace que la presión arterial se eleve. Las razones de la hipertensión arterial no siempre se conocen, pero algunos factores contribuyentes incluyen una alta ingesta de sodio, obesidad, genética e insuficiencia renal. Los síntomas más comunes incluyen dolor de cabeza al despertar, visión borrosa, mareos y depresión. La mayoría de las veces, no hay síntomas de hipertensión, por lo que se le conoce como «el asesino silencioso».
Un dolor de cabeza por hipertensión puede ser causado por una variedad de factores que no todos se atribuyen a la presión arterial alta. Solo en casos graves de presión arterial alta hay evidencia directa de dolor de cabeza por hipertensión. En todos los demás casos, es importante recordar que los dolores de cabeza pueden ser causados por el estrés diario o por niveles inusuales de ansiedad, que a su vez contribuyen a la hipertensión arterial. Los medicamentos para la hipertensión y la apnea del sueño también pueden causar dolores de cabeza en pacientes que tienen presión arterial alta.
Los investigadores en el campo de la medicina han realizado extensos estudios para determinar si existen dolores de cabeza por hipertensión, y los estudios han tenido resultados contradictorios. Algunos estudios muestran una correlación entre el dolor de cabeza y los casos graves de hipertensión, que es cuando la presión arterial es superior a 200 sistólica y 110 diastólica, pero la hipertensión leve y el dolor de cabeza no suelen estar asociados. Hay pocos datos médicos que demuestren que la presión arterial alta es la causa directa de un dolor de cabeza por hipertensión. La mayoría de los estudios concluyen que tanto la hipertensión como los dolores de cabeza son comunes en la población general, pero no necesariamente están relacionados.
Cualquier persona que experimente dolores de cabeza intensos o persistentes debe buscar atención médica. Las personas con hipertensión deben someterse a exámenes periódicos para determinar sus niveles de presión arterial. También es importante tomar los medicamentos recetados por un médico. Comer los alimentos adecuados y hacer ejercicio puede ayudar a mantener la presión arterial regulada y puede reducir la frecuencia de los dolores de cabeza por hipertensión.