¿Qué es la celulitis por MRSA?

La celulitis por MRSA es una inflamación grave de las capas inferiores de la piel y los tejidos subcutáneos inferiores, la dermis y la hipodermis, causada por una infección por Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (MRSA). MRSA es una infección por estafilococos que se contrae con frecuencia en los hospitales. Al igual que otras infecciones por Staphylococcus aureus, con mayor frecuencia infecta al paciente a través de roturas en la piel, como las causadas por cortes, mordeduras o heridas punzantes. Es tratable, pero debido a décadas de evolución bajo la presión selectiva creada por el uso generalizado de antibióticos, ha desarrollado inmunidad a muchos antibióticos comunes, como la penicilina. Si no se controla, una infección por celulitis por MRSA puede extenderse más allá de la piel hacia tejidos más profundos, lo que resulta en daños a los órganos y tejidos potencialmente fatales.

La celulitis por MRSA surge con mayor frecuencia en situaciones en las que un gran número de personas vive en las proximidades, como prisiones, hogares de ancianos y cuarteles militares. La infección por MRSA es un problema particular en los hospitales, ya que muchos residentes de los hospitales han debilitado el sistema inmunológico y han dañado la piel, ya sea por lesiones o por equipos médicos, como agujas y catéteres intravenosos. Sin embargo, este problema puede mitigarse en gran medida mejorando el saneamiento y la detección de MRSA. El riesgo de infección aumenta por las condiciones físicas que afectan la circulación, como la diabetes, la obesidad y el embarazo. El contacto frecuente con el ganado o con instalaciones comunes como vestuarios públicos y gimnasios también son factores de riesgo.

La celulitis por MRSA aparece como un área sensible y enrojecida que se propaga cerca de los pequeños forúnculos que se forman en el área donde ingresaron originalmente las bacterias MRSA. El área enrojecida está inusualmente caliente cuando se toca. A medida que avanza la infección, los forúnculos se vuelven cada vez más dolorosos, aumentan de tamaño y se llenan de pus. A diferencia de las infecciones cutáneas bacterianas más superficiales en la epidermis, que tienden a producir zonas enrojecidas continuas con bordes bien definidos, la zona enrojecida que aparece como consecuencia de la celulitis tiene un aspecto más parcheado y difuso. Sin embargo, es posible que ambos estén presentes al mismo tiempo, por lo que los signos visuales compatibles con una infección superficial no descartan necesariamente la posible existencia de una infección adicional en el fondo.

La celulitis por MRSA no controlada en los tejidos subcutáneos profundos puede causar fascitis necrotizante, conocida popularmente como «bacterias carnívoras», una condición en la que las toxinas producidas por las bacterias comienzan a destruir los tejidos blandos. Si MRSA ingresa al torrente sanguíneo o al sistema linfático de la víctima, puede diseminarse por el cuerpo y causar afecciones como piomiositis, infección de los músculos esqueléticos y neumonía necrotizante. Además, las toxinas producidas por MRSA pueden resultar en sepsis fatal o síndrome de choque tóxico.