¿Qué es la serositis?

La serositis es el término médico para una inflamación del revestimiento de los pulmones, el corazón o el abdomen y los órganos abdominales. Los tejidos que forman el revestimiento de estas partes del cuerpo se denominan tejidos serosos y forman sacos alrededor de estos importantes órganos. Una función adicional importante de estos tejidos es la secreción de líquido lubricante. Los síntomas de esta afección generalmente se observan junto con otros en quienes padecen diversas enfermedades inflamatorias graves y pueden causar molestias o dolor significativos.

Hay una serie de enfermedades en las que la serositis es un síntoma de diagnóstico o de aparición frecuente. Estos incluyen la enfermedad de Crohn, el lupus, la fiebre mediterránea familiar y la artritis juvenil. Todas estas son, en gran parte, enfermedades inflamatorias y se puede experimentar serositis aguda o crónica.

La enfermedad de Crohn es una inflamación de los intestinos causada por una respuesta autoinmune. La serositis abdominal es un síntoma clave de esta enfermedad. A veces, la afección también provoca una inflamación del revestimiento de los pulmones o de los sacos pulmonares.

Los síntomas de inflamación en el lupus comúnmente toman la forma de pericarditis, inflamación de la membrana cardíaca o pleuresía, que es la inflamación de los sacos pulmonares. Los dolores de pecho generalmente se experimentan en cualquier caso. Uno o ambos de estos tipos de inflamación generalmente se observan en casi la mitad de los pacientes con lupus, y son algunos de los síntomas indicadores más importantes de la enfermedad, aunque los profesionales médicos normalmente descartan otras causas antes de hacer un diagnóstico.

En la fiebre mediterránea familiar, la inflamación puede ocurrir en los pulmones, el corazón, el abdomen o los tres. Esta enfermedad hereditaria resulta en ataques de inflamación aguda que pueden ser muy dolorosos y pueden durar varios días seguidos, generalmente acompañados de un aumento de temperatura. Se sabe que los ataques abdominales se diagnostican erróneamente como apendicitis, con la consiguiente extirpación innecesaria del apéndice.

La artritis juvenil también puede estar acompañada de síntomas. Esto suele observarse en particular en pacientes que padecen artritis idiopática juvenil sistémica (AIJ), una condición dolorosa caracterizada por artritis con fiebre recurrente y erupciones cutáneas. En casos graves, los órganos internos pueden inflamarse y provocar pericarditis y otras inflamaciones graves.

El tratamiento de la serositis suele depender en gran medida del trastorno subyacente del que es un síntoma de presentación. Se pueden usar medicamentos antiinflamatorios, junto con analgésicos, para aliviar los síntomas. En algunos casos, se pueden recetar esteroides.