El epidiascopio es un tipo de proyector opaco desarrollado a principios del siglo XX. A diferencia del episcopio o el epidioscopio, que tienen la capacidad de proyectar solo imágenes opacas, los epidiascopios pueden proyectar imágenes tanto transparentes como opacas. Esta cualidad hizo que el dispositivo fuera especialmente útil en los círculos educativos durante la mayor parte del siglo.
La funcionalidad básica del epidiascopio implicaba aprovechar el poder de la luz para crear las imágenes. En los primeros modelos del epidiascopio y otros proyectores similares, se utilizó el centro de atención como medio. La luz se dirigiría hacia abajo sobre un objeto, creando la imagen. Para enfocar la luz y crear una imagen viable, se utilizaría una serie de lentes o espejos para dirigir la imagen hacia una pantalla. Si bien al principio era algo costoso de producir, el epidiascopio se volvió más asequible a medida que se perfeccionó el dispositivo. Junto con los modelos comerciales, se produjeron y comercializaron versiones de bajo consumo como juguetes para niños en edad escolar.
A mediados del siglo XX, se produjo el epidiascopio típico utilizando luz incandescente como fuente para crear la imagen. Los modelos de escritorio del dispositivo eran de uso común en escuelas y universidades de todo el mundo. A los pocos años, las lámparas halógenas comenzaron a reemplazar a las bombillas incandescentes, proporcionando una imagen proyectada aún más nítida.
Cuando la era de la computadora personal amaneció en la década de 1980, la nueva tecnología comenzó a reemplazar al epidiascopio. Utilizando proyectores que se conectan fácilmente a computadoras de escritorio y portátiles, fue posible crear imágenes usando software y proyectar los resultados en una pantalla superior. La combinación de una computadora portátil y un proyector hizo posible que los vendedores llevaran presentaciones y otros documentos a las reuniones con nuevos clientes o mostraran presentaciones en ferias comerciales con mucha mayor facilidad.
Si bien no se usa tan ampliamente como en el pasado, el epidiascopio todavía se usa a veces en escuelas y otros entornos de aprendizaje. Debido a que las transparencias que se utilizan con un epidiascopio se pueden crear utilizando programas de computadora o manualmente, el dispositivo ha permanecido en servicio y todavía se ofrece a la venta por varios fabricantes.