Una barra de oxígeno es una instalación que ofrece oxígeno concentrado para inhalación. Se hacen varias afirmaciones sobre las barras de oxígeno, que pueden promocionarse por ofrecer un servicio saludable y beneficioso. El oxígeno en altas concentraciones ciertamente tiene efectos recreativos, pero parece no tener beneficios conocidos para la salud e incluso puede ser peligroso. Las áreas urbanas pueden tener una variedad de barras de oxígeno, que generalmente aparecen en la guía telefónica o en los periódicos y sitios web de entretenimiento.
El concepto de barra de oxígeno fue pionero en Japón a fines de la década de 1990 y se extendió rápidamente al oeste de los Estados Unidos. Algunas barras de oxígeno se encuentran en los spas, como complemento a los servicios de spa. Otros se encuentran en salones y otros negocios recreativos, y los consumidores también pueden tropezar con una barra de oxígeno dentro de un bar normal. En algunos países, el oxígeno recreativo también está disponible en latas en algunas tiendas.
El oxígeno en sí es ciertamente vital para la vida humana, y la mayoría de las personas están acostumbradas a inhalar oxígeno en concentraciones de alrededor del 21%, lo que representa la concentración ambiental de oxígeno en el aire. Cuando la ingesta de oxígeno cae, las personas pueden experimentar graves problemas de salud y la muerte. Los profesionales médicos pueden ofrecer terapia de oxígeno a personas que tienen baja saturación de oxígeno en la sangre, y algunas personas usan oxígeno suplementario en casa como medicamento recetado. De forma recreativa, el oxígeno puede proporcionar una sensación de euforia.
En una barra de oxígeno, los huéspedes pagan una tarifa fija por minuto para inhalar oxígeno a través de una cánula nasal. Una vez que se inserta la cánula, la fuente de oxígeno se enciende y el cliente supuestamente se sentirá al mismo tiempo energizado y en paz. La mayoría de las barras de oxígeno son cautelosas al hacer declaraciones de propiedades saludables, porque no quieren infringir las regulaciones gubernamentales. En algunas barritas de oxígeno se ofrece oxígeno aromatizado mezclado con diversos aromas, para hacer la experiencia más interesante o con valor aromaterapéutico.
En los Estados Unidos, el oxígeno es en realidad un medicamento recetado, por lo que las barras de oxígeno violan técnicamente las regulaciones de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). La FDA deja el enjuiciamiento de las barras de oxígeno a la discreción de los estados individuales, aunque ha expresado cierta preocupación por la tendencia. Las personas con determinadas condiciones de salud como el asma, por ejemplo, no deben ingerir una concentración anormalmente alta de oxígeno, ya que pueden dejar de respirar.
Además, muchas de las sustancias, como los aceites que se utilizan para aromatizar el oxígeno en las barras de oxígeno, son fuentes potenciales de infección pulmonar. La FDA también advierte a los consumidores que tengan cuidado con el estado del equipo utilizado, ya que los filtros sucios y las cánulas reutilizadas pueden ser peligrosos. Por último, la calidad del oxígeno utilizado es cuestionable y está potencialmente contaminado con partículas en el aire y otras sustancias nocivas para la salud. Los representantes de la FDA también han señalado que los seres humanos evolucionaron en un entorno de 21% de oxígeno y que quizás sea mejor mantenerlo así.
Los defensores de la barra de oxígeno creen que el oxígeno puede proporcionar beneficios tangibles para la salud, aunque los estudios científicos no han respaldado esta opinión. En el peor de los casos, los partidarios argumentan que visitar un bar de oxígeno es una actividad nueva e inofensiva, cuando la instalación se mantiene profesionalmente.