Una presa contra inundaciones opera como parte de un sistema de control de inundaciones para proteger a las comunidades de las inundaciones incontroladas. Estas represas no crean reservorios para almacenar agua para su uso en el futuro, ni generan energía hidroeléctrica. Pueden ser instalados por agencias gubernamentales y comunidades, y están sujetos a regulaciones de seguridad. Una presa de inundación debe cumplir con las pautas de construcción y los reguladores pueden inspeccionarla periódicamente para confirmar que está en buenas condiciones de funcionamiento.
Para el manejo de inundaciones, las agencias pueden colocar represas contra inundaciones en puntos estratégicos de una cuenca, como grandes ríos y lagos. Estas represas controlan el flujo de agua a través de la cuenca y, en algunos casos, el área detrás de ellas puede estar seca la mayor parte del tiempo. Los lagos, arroyos y ríos estacionales pueden convertirse en un problema en condiciones de inundación, porque se desbordan rápidamente y pueden abrumar las vías fluviales y las comunidades.
En caso de lluvias intensas o cuando la escorrentía de aguas arriba se vuelve más pesada de lo habitual, la presa contra inundaciones puede entrar en funcionamiento. Retiene el agua y controla su liberación para permitir que los niveles de los lagos y ríos se estabilicen lentamente. Además de proteger a las comunidades de las inundaciones, esta medida también limita la pérdida de la capa superficial del suelo y otros problemas ambientales que pueden ocurrir en caso de inundaciones graves. Cuando las condiciones vuelven a la normalidad, las presas de control de inundaciones pueden volver a estar inactivas.
El diseño de una presa contra inundaciones puede variar, según el sitio de instalación y los datos de inundaciones registrados de años anteriores en esa área. Por lo general, incluye salidas y un aliviadero para emergencias para evitar la falla de la presa en una catástrofe. Las presas de control de inundaciones también incluyen equipos para medir las aguas de inundaciones y algunas proporcionan informes remotos para las agencias gubernamentales que necesitan poder monitorear las inundaciones y otras actividades. Se pueden usar varias técnicas de construcción para hacer una presa contra inundaciones, dependiendo del nivel de estrés que necesita para poder soportar.
Un sistema de control de inundaciones puede incluir una serie de presas, diques y otras medidas de seguridad para controlar y dirigir el agua a través de una cuenca en caso de mal tiempo. Las inundaciones son una forma extremadamente común de desastre natural en muchas regiones del mundo. El desarrollo de sistemas adecuados de control de inundaciones es fundamental por razones económicas, ambientales y de salud humana. El financiamiento para los programas de control de inundaciones generalmente proviene de agencias gubernamentales, aunque algunas comunidades también pueden recaudar fondos de forma independiente para la instalación de medidas adicionales para su salud y seguridad.