El berro de jardín, también conocido como peppergrass, es una hierba anual de rápido crecimiento en la familia Brassicaceae. Es una planta de tamaño pequeño a mediano que se cultiva comercialmente en tierra, hidropónicamente en agua y en contenedores para uso individual. Su sabor picante y picante hace que el berro sea uno de los favoritos de los chefs, especialmente en Europa. A lo largo de la historia, las personas han usado esta hierba para tratar muchas afecciones de salud diferentes. Se debe tener cuidado al consumir esta hierba porque tiene posibles efectos secundarios desagradables.
Esta hierba es originaria del norte de África. Se puede cultivar en todas las zonas de rusticidad del Departamento de Agricultura de EE. UU. Porque es anual y solo dura una temporada de crecimiento. El berro de jardín prefiere la luz solar plena durante ocho o más horas al día. Estas plantas se pueden cultivar en suelo o hidropónicamente en agua con un nivel de pH ácido, ligeramente ácido o neutro. Las semillas de berro se plantan típicamente a principios de la primavera o el otoño.
El berro de jardín alcanza la madurez aproximadamente 12 días después de la siembra. En la naturaleza, puede crecer hasta 2 pies de altura (60 cm). Las plantas domesticadas miden entre 6 y 12 pulgadas (15-30 cm) de altura. Este pariente de la planta de mostaza tiene flores diminutas, agrupadas, de color blanco a rosado que tienen solo 1/12 de pulgada (2 mm) de ancho. El follaje es verde y rizado.
Los chefs europeos e indios usan berros de jardín como guarnición, en ensaladas para agregar textura o en sándwiches para agregar sabor y crujiente. Sus hojas son ricas en hierro, ácido fólico, calcio, vitaminas C, A y E, y folato. Las semillas son ricas en ácidos grasos araquidónicos y linoleicos y contienen una cantidad considerable de proteínas.
El berro de jardín se ha utilizado en la medicina tradicional para las nuevas madres para aumentar la producción de leche materna, para regular el ciclo menstrual, ayudar con la absorción de hierro y como afrodisíaco. También se ha utilizado para estimular el apetito, como laxante y para calmar a los bebés con cólicos. Las semillas actúan como expectorantes y se han utilizado para tratar el asma, el dolor de garganta, la tos y la congestión. El lepidimoide fitoquímico se encuentra en sus semillas en germinación y se ha demostrado que reduce el azúcar en sangre después de una comida. Se dice que los ácidos araquidónico y linoleico hacen de los berros de jardín un refuerzo de la memoria.
Los expertos familiarizados con las propiedades de esta hierba recomiendan comerla solo con moderación porque puede tener efectos secundarios importantes. Esta planta puede inducir un aborto o un aborto espontáneo si se consume demasiado. El berro de jardín contiene bociógenos que evitan que el yodo sea absorbido por la glándula tiroides. Esto puede provocar hipotiroidismo o exacerbar el hipotiroidismo preexistente. Las personas sensibles a los aceites de mostaza pueden tener problemas digestivos, incluidos calambres y diarrea, si comen demasiado de esta planta.