¿Qué es el litigio de prueba?

El litigio de prueba es cuando un caso legal o una demanda va a juicio, en lugar de ser desestimado o resuelto fuera de los tribunales. Ya sea por un caso criminal como asesinato o un caso civil como una demanda por lesiones personales, el litigio judicial requiere que todas las partes involucradas cumplan con códigos de procedimiento específicos. Las salas de audiencias son los lugares habituales para los juicios. Un juez siempre preside los asuntos legales y muchos juicios tienen un jurado de personas para decidir el resultado del caso.

En algunos tipos de litigio de prueba, una de las partes involucradas puede solicitar un juicio con jurado. La mayoría de los países declaran a la persona que presenta la denuncia como «demandante». En el caso de que una comunidad haya presentado un cargo por asesinato contra una persona, entonces las personas de esa jurisdicción se convierten en demandantes. El «acusado» es la persona o entidad que corre el riesgo de perder la libertad, el dinero, la propiedad o cualquier otro reclamo debido a los supuestos actos que se cometieron.

En todo el mundo, los abogados, abogados o procuradores representan a los demandantes y acusados ​​durante las múltiples fases del litigio. En un caso de divorcio, por ejemplo, el abogado y su personal prepararán todos los documentos legales requeridos, harán los arreglos para que la documentación se presente en el tribunal correspondiente y harán que alguien entregue los papeles del divorcio a la otra parte. Luego, los abogados representan a cada parte en el tribunal durante el juicio.

El demandante debe permanecer involucrado en el proceso para obtener el máximo beneficio durante la fase de litigio del juicio. Él o ella puede pedirle a un abogado que llame o cite a testigos específicos que puedan respaldar cualquier reclamo realizado. El demandante también debe discutir con su representante legal cualquier posible «sorpresa», como reclamos de agresión doméstica que el acusado pueda plantear en su defensa dentro de la sala del tribunal.

El litigio judicial por asuntos penales es un poco más complejo pero sigue muchas de las mismas pautas básicas. Antes de que la policía detenga a un sospechoso en la mayoría de los países, debe tener pruebas de que la persona cometió un delito. Luego, un abogado del pueblo, o un fiscal, revisa la evidencia. Si el caso se entrega a juicio, el acusado debe tener en cuenta que podría estar en peligro de ir a la cárcel.

Algunas ofensas, como conducir en estado de ebriedad, pueden requerir menos de un año de cárcel. La sentencia real depende de la naturaleza del delito, el país en el que se cometió y los antecedentes penales del acusado. Otros delitos como la agresión sexual y el asesinato pueden generar sentencias de más de 20 años de prisión. Algunos delitos, como el asesinato o la traición a la patria, se consideran delitos “capitales” y pueden dar lugar a la ejecución del acusado en virtud de las leyes de pena de muerte de algunos países.