Una mamografía realiza estudios de imágenes médicas de los senos para la detección y el diagnóstico del cáncer. Los mamografos tienen capacitación en radiología y el uso de la tecnología de rayos X para estudios de imágenes del cuerpo. Algunas buscan una certificación específica en mamografía para ofrecer los mejores servicios posibles a sus pacientes. Dicha capacitación también puede potencialmente ampliar las oportunidades de empleo en las regiones donde los empleadores contratan preferentemente mamografías que tienen esta certificación.
Cuando un paciente es referido al mamógrafo, el técnico realiza una entrevista de ingreso y llena un formulario de ingreso del paciente. Este profesional de la salud también analiza los riesgos y beneficios de la mamografía con la paciente para asegurarse de que comprende por qué se ordena el examen, qué ofrece y cuáles podrían ser los riesgos potenciales. Cuando la paciente está completamente informada, el mamógrafo puede comenzar el estudio de imagen.
La mamografía requiere un posicionamiento cuidadoso de cada seno en una máquina de imágenes para obtener una imagen clara, nítida y utilizable. Esto requiere entrenamiento y práctica, porque cada seno es ligeramente diferente. Los errores pueden ser peligrosos, ya que pueden ocasionar la falta de los primeros signos de cáncer de mama. El mamógrafo toma imágenes de los senos con dosis bajas de radiación para minimizar los riesgos para el paciente y debe tomar precauciones radiológicas para proteger al paciente y a todo el personal del área de la exposición a niveles peligrosamente altos de rayos X.
Después de que el mamógrafo termina la imagen, generalmente es necesario verificar las imágenes para asegurarse de que sean claras y nítidas. Si hay un problema, las imágenes se pueden volver a tomar de inmediato, en lugar de tener que volver a llamar al paciente para repetir el proceso. Dependiendo del nivel de capacitación y certificación, el mamógrafo podría ofrecer información sobre las imágenes, o las imágenes y la paciente podrían ser derivadas a un médico que pueda leer las imágenes y discutir los hallazgos.
Este trabajo puede llevarse a cabo en clínicas y hospitales, así como en centros médicos móviles. La detección móvil del cáncer de seno se ofrece en muchos países para garantizar que tantas mujeres como sea posible tengan acceso a la mamografía con el fin de detectar el cáncer de seno de manera temprana. Los mamógrafos en los programas de detección móvil pueden trabajar predominantemente con pacientes de bajos ingresos y pueden realizar educación y divulgación como parte de su trabajo.
El salario de los mamografos puede variar. Las personas que tienen más capacitación y certificaciones pueden ser más propensas a obtener un mayor nivel de pago y beneficios. Los mamografos que están dispuestos a viajar con clínicas móviles o como parte de un equipo que brinda cobertura rotativa a un grupo de centros de salud también pueden ganar un salario más alto.