¿Qué son los recursos sostenibles?

Los recursos sostenibles son aquellos recursos que se reponen a una tasa igual o mayor que la tasa de consumo. Esto puede hacerse mediante procesos naturales o mediante métodos diseñados por humanos, a menudo ordenados o al menos promovidos por un organismo gubernamental. También puede considerarse un recurso cuyo uso no agota su suministro, como es el caso de la energía eólica.

Los recursos renovables y sostenibles no son lo mismo. A diferencia de un recurso renovable, uno sostenible no tiene que reponerse rápidamente, siempre que se consuma lentamente. Por ejemplo, si el consumo de petróleo cayera a un nivel que no afectara el suministro mundial, se consideraría sostenible, aunque generalmente no se considera un recurso renovable. Dichos recursos pueden ser producto del consumo, la reposición o una combinación de ambos.

Cuando se trata de la búsqueda de fuentes alternativas de energía, las fuentes sostenibles se han convertido en un área de estudio muy importante. Actualmente, las fuentes de energía preferidas del mundo se basan en combustibles fósiles: petróleo, carbón y gas natural. Por lo general, estos recursos no se recargan a un ritmo muy rápido y, por lo tanto, se consideran insostenibles. Una vez que se agoten, los suministros tardarán cientos de miles de años en reconstruirse, si es que se reconstruyen por sí mismos.

Además del suministro de energía, los recursos sostenibles también se aplican a muchas otras facetas de la vida humana. La producción de alimentos puede ser sostenible o no sostenible, por ejemplo. La pesca proporciona una ilustración de este concepto. La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos informa que de las 187 especies de peces de valor comercial que rastrea, más de 40 fueron capturadas más allá de un punto de sostenibilidad. Sin embargo, con las políticas adecuadas, las pesquerías pueden mantenerse por sí mismas.

Lo mismo puede aplicarse a otros problemas como la tala y la deforestación. Los árboles se pueden reponer con el tiempo, pero para garantizar eso, se deben implementar políticas con respecto a la cosecha y la replantación. Sin esas políticas, es posible que la deforestación aumente rápidamente hasta el punto en que la madera y otros productos forestales ya no sean sostenibles.

Los consumidores también pueden ayudar a promover prácticas que dependen de recursos sostenibles al informarse sobre los productos que compran. Si bien la mayoría no puede elegir de dónde proviene su energía, pueden tomar decisiones con respecto a los alimentos que comen, los muebles que compran y tal vez incluso el tipo de combustible con el que funcionan sus vehículos. Por ejemplo, la elección del etanol, que proviene del maíz, el azúcar u otros productos agrícolas, promueve el uso de recursos renovables.