Una silla de ruedas inclinable es un tipo de dispositivo móvil de reducción de presión en el que el asiento de la silla puede inclinarse de cero a aproximadamente 40 grados mientras sus ruedas permanecen estables en el suelo. Aunque generalmente está hecho de aluminio o acero, este diseño hace que una silla de ruedas sea compacta y pesada y no permite que la silla de ruedas se pliegue. Hay dos tipos de sillas de ruedas basculantes: el modelo manual, que es empujado por un cuidador, y la silla de ruedas eléctrica, que es autooperada por el usuario a través de un panel de control centralizado. A diferencia de otros tipos de sillas de ruedas, un sistema de inclinación aborda la necesidad de los pacientes de cambiar de posición con frecuencia para minimizar las úlceras por presión causadas por estar sentado durante mucho tiempo. En última instancia, la silla de ruedas inclinable proporciona a las personas con problemas de movilidad una mayor comodidad general y una mayor tolerancia al sentarse.
Los pacientes disfrutan de varios beneficios de una silla de ruedas basculante que no encontrarán en otros tipos de modelos de diseño médico. Por ejemplo, sin un sistema de inclinación, un paciente con una curva hacia adelante en la parte superior de la columna vertebral estaría constantemente de cara al piso. La adición de un mecanismo de inclinación le permite ver su entorno con facilidad. En este tipo de silla de ruedas, solo cambia la orientación física, por lo que un paciente aún puede mantener la orientación adecuada con sus dispositivos médicos electrónicos y de comunicación.
La silla de ruedas basculante también previene varios tipos de cizallamiento, que es la fricción en los tejidos de la piel causada por el arrastre sobre una superficie; El cizallamiento a menudo da como resultado una desalineación del cuerpo en la silla. Este beneficio hace que una silla de ruedas basculante sea especialmente adecuada para pacientes con parálisis cerebral o aquellos con lesiones en la cabeza y la médula espinal cuyos movimientos están muy restringidos.
Inicialmente considerada un dispositivo que salva vidas y proporciona movilidad a los parapléjicos, la silla de ruedas basculante ahora se ha convertido en un equipo que permite a sus usuarios optimizar sus habilidades en todos los aspectos de la vida. Una de estas áreas es el deporte, donde los atletas discapacitados que participan en carreras y otras competiciones han convertido sus sillas de ruedas en extensiones de sus cuerpos. Esto ha llevado la ingeniería y el diseño de sillas de ruedas deportivas al siguiente nivel, particularmente los modelos de carreras.
Si bien la comodidad y la seguridad del paciente son las consideraciones principales para las sillas de ruedas inclinadas, la movilidad y los materiales livianos son atributos críticos para las sillas de ruedas deportivas. Claramente, la dirección de la tecnología de asistencia es hacia diseños que se adapten a las necesidades específicas de las personas. Esto incluye modelos especializados que se inclinan en el espacio a sillas de ruedas de carreras que pueden alcanzar velocidades de más de 30 millas por hora (aproximadamente 48 kph).