El plexo braquial es un conjunto de nervios, uno a cada lado del cuerpo, que ayudan a proporcionar sensación en los hombros, los brazos, las manos y el pecho. El daño en esta área, que puede ocurrir de muchas maneras, puede crear una afección llamada neuritis braquial, que generalmente afecta más a los hombros y es más probable que afecte a los hombres. Es muy difícil ignorar esta condición, dada la extrema incomodidad que crea cuando aparece por primera vez.
Los síntomas de la neuritis braquial incluyen la aparición de dolor en el hombro, generalmente en un solo lado. Este dolor puede observarse con otros síntomas como pérdida de reflejos o alteración del rango de movimiento del hombro. En casos complicados, dado que esta enfermedad puede existir durante un período de tiempo prolongado, otras partes del plexo braquial no logran suministrar los impulsos adecuados a los brazos o al pecho y, aunque es raro, la respiración puede verse afectada por esta falla.
Las personas que tienen esta afección deben consultar a un profesional médico para obtener un diagnóstico, pero la causa no siempre es fácil de determinar. Los profesionales de la salud evalúan los síntomas y, si sospechan de neuritis braquial, es posible que aún no tengan una respuesta sobre la causa. Hay muchos problemas que pueden provocar esta enfermedad, incluida una forma genética de la enfermedad. Otros factores de riesgo potenciales incluyen tener ciertas enfermedades autoinmunes; estar recientemente enfermo con una infección bacteriana, viral o fúngica; o recibir vacunas. Alternativamente, algunos tumores pueden causar estos síntomas.
Entonces, tratar este problema debe ser un esfuerzo doble. Primero, se necesita el manejo del dolor y, dependiendo de la tolerancia al dolor, los pacientes pueden recibir ayuda con medicamentos de venta libre o requerir opiáceos. Cualquier enfermedad subyacente presente puede necesitar tratamiento. Las enfermedades autoinmunes podrían caer en esta categoría, al igual que las infecciones bacterianas o parasitarias persistentes. Incluso una vez que se trata el dolor, la incomodidad puede durar un período de tiempo prolongado, con frecuencia hasta dos años.
Los profesionales médicos generalmente recomiendan la fisioterapia para preservar el rango de movimiento en el hombro y prevenir el desgaste muscular. En raras ocasiones, estos pasos no son suficientes o la respiración se ve afectada, por lo que los proveedores de atención médica pueden considerar medidas de tratamiento más agresivas en este punto, incluida la cirugía para cambiar la forma en que el plexo braquial envía y recibe las respuestas nerviosas. La cirugía generalmente se considera solo cuando otro tratamiento no es efectivo.
Muchas personas que tienen neuritis braquial se recuperan por completo. Esto es menos probable si la afección ocurre simultáneamente y afecta a cada plexo braquial, lo cual es bastante raro. En general, la afección, aunque quizás no sea su causa, es bastante fácil de diagnosticar debido a su aparición repentina, bastante alarmante e incómoda. Afortunadamente, la enfermedad en sí tiene una baja tasa de aparición, aunque una persona que crea que puede tenerla debe consultar con un profesional médico de inmediato.