Las causas más comunes de suicidio en adolescentes incluyen depresión, abuso de sustancias y aislamiento social. Los factores de riesgo de suicidio en adolescentes incluyen trastornos psicológicos, sentimientos de inutilidad, antecedentes familiares de suicidio, intimidación y abuso físico y sexual. Las señales de advertencia incluyen conductas autodestructivas, conversaciones frecuentes sobre la muerte o el suicidio, incapacidad para concentrarse, aislamiento social y pérdida de interés en las actividades o comidas favoritas. Los factores de riesgo de suicidio de los adolescentes se pueden reducir mediante asesoramiento, intervenciones por abuso de sustancias y medicamentos para controlar la depresión.
Algunas causas están relacionadas con los antecedentes familiares y la salud mental. Un adolescente cuyo padre se quitó la vida, por ejemplo, podría considerar el suicidio como una solución razonable a los desafíos de la vida. Los adolescentes con problemas de salud mental, como el trastorno bipolar, pueden suicidarse como parte de un episodio de depresión. Algunas condiciones depresivas tienen raíces genéticas y aumentan el descontento de un adolescente con la vida.
Las causas del suicidio adolescente también pueden incluir eventos específicos de la vida. Un adolescente que ha sido abusado sexualmente podría contemplar la posibilidad de suicidarse para escapar de los recuerdos del evento traumático. Algunos adolescentes viven en hogares violentos y ven el suicidio como una forma de escapar de los sentimientos de miedo perpetuo. Los adolescentes homosexuales que se encuentran con reacciones hostiles de la familia y el acoso de los compañeros de clase a veces consideran quitarse la vida para escapar del rechazo constante. Un adolescente que acaba de pasar por la ruptura de una relación u otro evento doloroso también puede ser más propenso al suicidio sin un sistema de apoyo social establecido.
Las señales de advertencia de suicidio en adolescentes incluyen una amplia gama de comportamientos. Un adolescente que está deprimido puede hablar sobre el suicidio, la muerte o el deseo de alejarse de todo. Podría tener problemas para dormir o podría evitar comer. La caída de calificaciones y la incapacidad para concentrarse son otros signos. Los comportamientos autodestructivos también son comunes, como el abuso de sustancias, el exceso de velocidad o las peleas con otros adolescentes o adultos.
Los padres, maestros y otras personas que notan las señales de advertencia pueden tomar medidas familiarizándose con las causas del suicidio adolescente. Hablar con el adolescente sobre sus dificultades es un buen punto de partida. Hacer arreglos para que hable con un consejero profesional a menudo es importante para determinar la causa de los pensamientos suicidas y para administrar el tratamiento. Un profesional capacitado puede recetar medicamentos para tratar la depresión y otros problemas de salud mental que pueden estar detrás de las tendencias suicidas. El tratamiento por abuso de sustancias también es una forma importante de eliminar una de las causas más comunes de suicidio de adolescentes.