Si bien puede parecer que tomarse el tiempo para elegir la mejor grapadora de papel es irrelevante, en realidad puede mejorar la eficiencia en el trabajo y reducir ciertos problemas de papeleo. Hay varios tipos de grapadoras, desde la versión mini hasta la más grande y resistente. Todos tienen el mismo propósito de conectar documentos, pero varían en el alcance de sus capacidades.
Una grapadora de papel de alta resistencia suele tener grapas más gruesas que pueden atravesar más hojas de papel que una grapadora típica. Esta es una buena opción para empresas o particulares que a menudo tienen que engrapar una pila de papeles. En algunos casos, las grapadoras de alta resistencia pueden grapar más de cien hojas de papel a la vez.
Para aquellos que estén interesados en seguir la ruta ecológica, una grapadora de papel sin grapas puede ser una excelente opción. Por lo general, funciona perforando cuidadosamente un agujero en las esquinas de los papeles donde iría una grapa y luego doblando las pequeñas piezas perforadas juntas. Este tipo de grapadora funciona mejor con solo unas pocas hojas de papel, sin embargo, puede ahorrar bastante dinero con el tiempo en grapas, especialmente para una empresa que usa una cantidad sustancial de ellas.
Una grapadora de papel eléctrica es la mejor opción para quienes tienen problemas en las manos. Por ejemplo, aquellos que tienen problemas en las articulaciones, artritis o incluso aquellos con un dedo roto pueden encontrarlo útil. Si bien muchos requieren estar conectados a la pared, hay algunos que son inalámbricos.
Una grapadora de papel en miniatura es una buena opción para aquellos que no tienen un área de trabajo grande e incluso para estudiantes que tienen un espacio limitado debido a que usan un escritorio pequeño o guardan todo en una mochila o casillero. También es una opción para aquellos que a menudo están en movimiento debido al trabajo. Ocupa poco espacio en un maletín o bolso de trabajo y permite un uso fácil sin ser voluminoso. Sin embargo, las grapas pequeñas necesarias pueden ser más difíciles de usar que una grapadora tradicional.
Una grapadora de papel típica es una herramienta útil para tenerla en casa o en la oficina. Una grapadora básica suele ser suficiente para muchas personas que no tienen circunstancias especiales para las que sería mejor una grapadora especial. Una grapadora de buena calidad suele ser relativamente económica, por lo que incluso aquellos con un presupuesto ajustado pueden comprar una que no se rompa fácilmente y sea una pérdida de dinero.