¿Qué son los osteoblastos?

Los osteoblastos son células que se originan en la médula ósea y contribuyen a la producción de hueso nuevo. Estas células forman la matriz de la estructura ósea y también juegan un papel en la mineralización de la matriz ósea. El cuerpo construye y descompone constantemente los huesos, lo que hace que los osteoblastos sean bastante críticos. La contraparte del osteoblasto es el osteoclasto, una célula responsable de descomponer el hueso.

A medida que las personas envejecen, la producción de osteoblastos disminuye. Esta es la razón por la que las personas mayores tienden a tener huesos más frágiles que corren el riesgo de fractura, y por qué tardan más en sanar después de las roturas, porque tienen menos células para reconstruir el hueso dañado. La salud ósea también puede verse influenciada por la cantidad de calcio disponible en la dieta, ya que los osteoblastos necesitan calcio para trabajar en el proceso de formación de hueso.

Estas células pueden diferenciarse en varios tipos de células diferentes, además de trabajar para formar hueso. Un osteocito es un osteoblasto que queda atrapado en la matriz ósea. Los osteocitos no pueden dividirse y desarrollan largas extensiones para comunicarse con otros osteocitos. Estas células mueven nutrientes y desechos a través de la matriz ósea. Las células del revestimiento óseo son osteoblastos que se adhieren a la superficie del hueso y se aplanan en el proceso.

Las células del revestimiento óseo parecen desempeñar un papel en la activación de osteoblastos y osteoclastos, respondiendo a las hormonas y cambiando las condiciones del cuerpo para desencadenar la actividad más adecuada. También regulan la cantidad de calcio que puede ingresar al hueso, actuando como una membrana selectivamente permeable que puede permitir que el calcio fluya a través del hueso o bloquear la absorción de calcio.

Los osteoblastos son fundamentales para la estructura y la integridad del hueso. No solo construyen hueso nuevo, también mantienen y fortalecen el hueso existente, asegurando que la matriz no se vea comprometida y que sea lo más uniforme posible. Al combinarse con osteoclastos, mantienen el hueso en un estado constante de renovación que elimina las áreas de debilidad y aborda las grietas, fracturas y otros problemas.

Visto en aumento y en sección transversal, un trozo de hueso revela una próspera variedad de osteoblastos y osteoclastos en funcionamiento, y se pueden ver claramente las pequeñas fosas, conocidas como lagunas, que albergan los osteocitos en forma de estrella. La ampliación también muestra la complejidad y el detalle de la matriz mineralizada que forma los huesos en todo, desde musarañas hasta elefantes.