Una superburbuja es una gran colección de gases sobrecalentados que se forman cuando numerosas estrellas de un sistema relacionado mueren juntas. En lugar de crear una sola supernova, las estrellas generan una explosión de energía y vientos estelares que pueden crear una estructura de cientos de años luz de diámetro. Se necesitan instrumentos especiales para identificar las superburbujas, porque generalmente no se encuentran en el espectro visible. Comprender cómo y por qué se forman tales fenómenos ayuda a los investigadores a aprender más sobre la naturaleza del universo.
Los investigadores pasaron más de un siglo desconcertados por los orígenes de los llamados rayos cósmicos de partículas cargadas eléctricamente que parecían estar en todas partes del universo. No pudieron encontrar una explicación racional de sus orígenes, pero definitivamente sabían que existían y sabían que planetas como la Tierra se beneficiaban del blindaje de las estrellas acompañantes para evitar la exposición a los rayos cósmicos más duros. Sin el Sol, la Tierra sería constantemente golpeada por partículas de alta energía que harían la vida imposible.
Usando telescopios que buscan emisiones en el rango de rayos gamma y X, los investigadores finalmente determinaron de dónde provenían los rayos cósmicos: superburbujas esparcidas por todo el universo. Una superburbuja se forma cuando varias estrellas agrupadas muy cerca mueren, creando múltiples explosiones masivas de energía en forma de supernovas. Además, también generan vientos estelares que se arremolinan y calientan los gases a temperaturas extremadamente altas. Se forman conchas que encierran los gases calientes y crean una superburbuja.
En realidad, el sistema solar se encuentra en el corazón de lo que solía ser una superburbuja. Los investigadores han identificado burbujas en varias regiones del espacio buscando su firma reveladora. Esto les ayuda a determinar la edad del universo, rastrear la formación y muerte de los sistemas estelares y aprender más sobre la composición general del universo. Las superburbujas también explican la fuente constante de rayos cósmicos que hace que gran parte del espacio sea muy hostil para los organismos vivos que no pueden sobrevivir bajo una exposición constante a partículas de alta energía.
Se pueden producir imágenes de superburbujas coloreando los datos del telescopio para mostrar a las personas la forma y estructura específicas de estos fenómenos. No se producen en una forma de burbuja perfecta, sino en una nube de gas que puede ser de naturaleza abstracta. Algunas de estas conversiones utilizadas para convertir las emisiones no visibles en una imagen comprensible son bastante impactantes visualmente. Al igual que otras imágenes del espacio profundo, las imágenes de superburbujas se utilizan a veces en materiales promocionales para telescopios, organizaciones de astronomía y agencias gubernamentales dedicadas a la investigación y exploración espacial.