¿Qué significa vivir de la grasa de la tierra?

El dicho «vivir de la grasa de la tierra» significa vivir bien aprovechando la abundancia del mundo y todo lo que el mundo tiene para ofrecer. La expresión implica vivir cómodamente sin demasiadas dificultades. Aprovechar lo que el mundo tiene para ofrecer puede entenderse en relación con cualquier conjunto de circunstancias, que van desde una existencia agraria hasta el más alto grado de riqueza moderna. A veces, el idioma también implica opulencia, exceso o pereza, pero estas son connotaciones secundarias.

Las primeras definiciones de la palabra «gordo» se refieren a la parte mejor, más rica o más gratificante de algo. En este sentido, una de las primeras referencias a esta frase proviene de la Biblia King James, en Génesis 45: 17-18. Aquí, José recibe instrucciones de ir a Canaán, donde se le dará «el bien de la tierra de Egipto». Se le dice que a su llegada «comerá la grasa de la tierra». Este pasaje sugiere que la tierra producirá abundancia para su familia.

“Vivir de la grasa de la tierra” históricamente ha traído consigo una sensación de abundancia proveniente de la propia Tierra, como de los abundantes cultivos que crecen en suelos ricos o de una cornucopia de recursos naturales disponibles. Esta frase puede referirse a un entorno natural exuberante que necesita poco cultivo para sustentar la vida humana, un lugar bueno para la agricultura, la pesca, la caza o cualquier otra cosa que sea de soporte vital inmediato. Las interpretaciones modernas pueden incluir referencias a cosas valiosas debajo de la tierra, como gemas o combustibles fósiles. Otras interpretaciones pueden extender el significado histórico a los ámbitos de la industria, el comercio o la economía.

Cuando la expresión se aplica a un entorno natural, a menudo denota agricultura, anti-consumismo o un estilo de vida simple. Tales referencias podrían incluir la idea de un «regreso a la naturaleza» en el que los individuos podrían abandonar las complejidades de la sociedad moderna para simplemente «vivir de la grasa de la tierra». Este significado es casi el opuesto de otra connotación moderna que equipara la expresión con opulencia y exceso.

En los casos en que la expresión idiomática «vivir de la grasa de la tierra» se refiere a la opulencia del primer mundo, la implicación es que esta recompensa ha llegado con relativa facilidad a quien la tiene. A veces se atribuye un juicio de valor negativo a este uso de la prosperidad fácil, pero no siempre. Cuando el idioma hace referencia a una gran riqueza, a menudo hay una complacencia implícita, un derecho falso o un sentido de riqueza que se da por sentado.