La demencia es una forma de trastorno del pensamiento que afecta la memoria. Cuando un médico considera que la discapacidad mental de un paciente es demasiado grave para que la persona viva sin supervisión, esto se conoce como demencia clínica. Los médicos utilizan la clasificación de demencia clínica (CDR) para evaluar el grado de demencia de un paciente. Otros métodos para evaluar la demencia son las pruebas de memoria, los exámenes del estado mental y las tareas de resolución de problemas.
El CDR se basa en un proyecto sobre la memoria y el envejecimiento que fue creado por la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en Missouri. En este proyecto, se utiliza una escala de cinco calificaciones para clasificar la gravedad de la demencia. Cero indica que no hay demencia, 0.5 indica posible demencia, 1 es demencia leve, 2 es demencia moderada y 3 es demencia severa.
Se utilizan seis dominios diferentes para evaluar la función mental. Son memoria, orientación, juicio y resolución de problemas, asuntos comunitarios, hogar y pasatiempos y cuidado personal. Cada dominio recibe su propia fila en un gráfico, con la escala de gravedad en la parte superior, y cada dominio recibió una calificación. Luego, estos puntajes se sumaron para producir una calificación general de demencia. El gráfico ofrecía una descripción general de la competencia mental general de un individuo.
La tabla de clasificación de la demencia clínica se desarrolla a partir de las respuestas a un cuestionario de 10 páginas. El paciente, o el cuidador si el paciente no responde, responde preguntas sobre su capacidad para comprender instrucciones comunes. Las preguntas pueden referirse a la fecha actual, la capacidad de manejar el dinero, el aseo y otros factores de la vida diaria.
Este sistema de clasificación ha sido estandarizado por clínicas y hospitales para la evaluación de diferentes tipos de demencia. Se usa comúnmente para evaluar la demencia en los ancianos que surge de la enfermedad de Alzheimer. El sistema también se puede utilizar para evaluar otras formas de demencia, como las que surgen del alcoholismo, la enfermedad de Parkinson o una enfermedad de inmunodeficiencia adquirida como el SIDA.
La calificación clínica de demencia no se usa generalmente para evaluar la alteración de la conciencia, como la que surge de lesiones en la cabeza o toxicidad orgánica. Esto se debe a que ha sido diseñado para evaluar el estado mental independientemente de la condición física. Se ha encontrado que el cuestionario de calificación de la demencia clínica tiene una alta correlación con las pruebas y exámenes de memoria, como el mini examen del estado mental (MMSE). Por ejemplo, se encontró que aquellos que obtuvieron puntajes altos en este tipo de pruebas también obtuvieron buenos puntajes en el examen CDR, y viceversa.