Una proa con bulbo es un diseño de barco con una bombilla montada en la parte delantera del barco debajo de la línea de flotación para reducir la resistencia. Esto puede integrarse en los diseños iniciales de un barco e implementarse en el astillero, o agregarse en una actualización. El diseño puede reducir los costos de combustible y hacer que una embarcación funcione más suavemente. Se suma a los costos de diseño y construcción del barco, por lo que se recomienda un análisis cuidadoso de costo-beneficio para determinar si es apropiado para un buque determinado.
Aunque la creación de este diseño a menudo se acredita a la Marina de los Estados Unidos, también se desarrolló de forma independiente en la Armada Imperial Japonesa y se usó en otros países. El arquitecto naval estadounidense que está asociado con este diseño buscaba una forma de disminuir los costos operativos en grandes embarcaciones como portaaviones. Estos barcos operan a una velocidad constante durante la mayor parte de su despliegue, hasta que llegan a un anclaje. También requieren enormes cantidades de combustible para operar, gracias a su tamaño y peso. Los arquitectos navales desarrollaron el arco con bulbo y notaron mejoras considerables en la eficiencia, entre cinco y 15%, lo que es significativo en un buque de ese tamaño.
La proa bulbosa funciona al interrumpir el flujo de agua para limitar el arrastre del barco. Esto reduce la cantidad de combustible necesaria para impulsar el barco, particularmente cuando su velocidad es constante. Los mejores resultados se observan con barcos más grandes que tienden a crear más resistencia. Las embarcaciones más pequeñas, como los veleros recreativos, son menos adecuadas para el diseño de proa con bulbo. Si bien podría aumentar la eficiencia, los ahorros serían pequeños en comparación con los costos de implementación.
Los arcos bulbosos tienden a reducir el tamaño de la ola creada por la proa del barco a medida que se mueve a través del agua. Además de reducir la resistencia, esto puede ayudar a que la nave se mueva más suavemente, con menos balanceo y movimiento de lado a lado mientras está en marcha. Reducir el tamaño de la estela también hace que la navegación sea más segura para otras embarcaciones en el área. Una estela grande puede ser muy perjudicial para los barcos más pequeños, una consideración importante en la arquitectura naval, ya que los capitanes quieren evitar alterar el transporte marítimo circundante.
Los arquitectos navales colocan la bombilla en la base de la proa, en la parte delantera de la nave, y la montan debajo de la línea de flotación. Mientras el barco está en marcha, no es visible. Si las reparaciones o el mantenimiento son necesarios, los buzos pueden reparar el arco con bulbo. De lo contrario, el armador deberá esperar hasta que el barco esté en dique seco y la bombilla sea visible para realizar las reparaciones necesarias.