¿Qué es una aguja para médula ósea?

Una aguja de médula ósea es un dispositivo que se usa en un trasplante de médula ósea, un procedimiento que se usa en varios tratamientos para algunas afecciones médicas graves. La anemia aplásica, algunos trastornos de inmunodeficiencia y cánceres como la enfermedad de Hodgkin y la leucemia a veces se tratan con trasplantes de médula ósea. El primer paso es utilizar una aguja de médula ósea para extraer la médula ósea del donante, que en algunos casos también puede ser el paciente.

Una aguja para la médula ósea se diferencia de otros tipos de agujas en varios aspectos. A diferencia de muchas agujas médicas, la mayoría de las cuales se usan para inyecciones, se usa una aguja de médula ósea para extraer algo. Estas agujas tienen características de diseño que les permiten realizar este importante procedimiento médico. Primero, las agujas de la médula ósea son más gruesas que una aguja hipodérmica promedio, que generalmente son de calibre 12. La mayoría de las agujas hipodérmicas son más pequeñas, por lo general de al menos calibre 16.

Ambos tipos de agujas se utilizan con jeringas. La jeringa que se usa con una aguja para la médula ósea suele tener una capacidad significativamente mayor, porque se pueden extraer hasta dos cuartos de galón (1.9 litros) de médula ósea y sangre del donante o del paciente. La jeringa para una aguja de médula ósea generalmente también se coloca después de que se inserta la aguja, en lugar de antes de que se inserte la aguja.

Las agujas para la médula ósea suelen tener un mango que es muy diferente al de otros tipos de agujas. Existen diferentes diseños de diferentes fabricantes, pero la mayoría tiene un mango resistente para brindarle al profesional médico el agarre y la palanca necesarios para forzar la punta de la aguja en el hueso. Las agujas también tienen una sección interior extraíble especial llamada trócar. Esto se extrae después de la inserción para permitir la extracción de la médula, un proceso llamado aspiración de médula ósea.

A veces, se extrae una pequeña cantidad de médula ósea para obtener una muestra, llamada biopsia, y se usa el mismo tipo de aguja para este procedimiento. Durante una biopsia de médula ósea, no se extrae el trócar y un pequeño núcleo de hueso y médula queda atrapado en la aguja. Luego, esta muestra se utiliza para diversas pruebas médicas, cuyos resultados son útiles en las pruebas de posibles donantes.