La atrofia ventricular izquierda (LAT) es una reducción en el tamaño del ventrículo izquierdo del corazón, la cámara del corazón responsable de bombear sangre recién oxigenada al resto del cuerpo. Las personas con esta afección pueden experimentar una serie de complicaciones de salud y existen tratamientos disponibles para detener o revertir la atrofia. Por lo general, un cardiólogo debe supervisar la atención de un paciente con atrofia ventricular izquierda, incluidos controles periódicos para ver qué tan bien responde el paciente al tratamiento.
El corazón es un músculo y, al igual que otros músculos, puede sufrir atrofia debido a factores como enfermedades o falta de uso. Los pacientes con ciertas enfermedades crónicas pueden tener riesgo de LAT, al igual que las personas en reposo en cama. Los pacientes menos activos no usan tanto su corazón y el músculo puede comenzar a debilitarse. Las lesiones de la médula espinal y la parálisis están asociadas con la atrofia del ventrículo izquierdo, al igual que los vuelos espaciales.
La disminución del tamaño del ventrículo obliga al músculo restante a trabajar más. Puede ser menos eficiente y los pacientes pueden comenzar a notar síntomas circulatorios como el azulado de los dedos de las manos y los pies porque no están recibiendo suficiente oxígeno. La caída de sangre oxigenada también puede dañar órganos como el cerebro, que dependen de un suministro constante de oxígeno para las funciones celulares. Los pacientes pueden experimentar fatiga, mareos y dificultad para realizar actividades físicas debido a su corazón debilitado.
También es común ver arritmias cardíacas con atrofia del ventrículo izquierdo. Un médico puede leer un electrocardiograma para determinar la naturaleza y el origen de la arritmia. Las imágenes médicas para visualizar el corazón también pueden ser útiles y pueden proporcionar información importante sobre la cantidad de músculo que se ha desgastado debido a una enfermedad o falta de uso. Si está disponible, un médico observará exploraciones antiguas y medidas de la función cardíaca para identificar signos de cambios, utilizando esas exploraciones como base para la salud cardíaca del paciente.
El tratamiento para la atrofia ventricular izquierda generalmente implica ejercicio cardíaco para que el corazón funcione y reconstruya el músculo. Esto puede requerir trabajar con un fisioterapeuta para diseñar un régimen de ejercicio seguro y cómodo para el paciente. Para las personas con problemas de movilidad importantes, es importante equilibrar la seguridad del paciente con la necesidad de ejercitar el corazón. Los astronautas generalmente deben seguir pautas estrictas de aptitud física tanto en tierra como durante las misiones para proteger sus cuerpos de la atrofia y otras complicaciones de un entorno ingrávido.