¿Qué son las redes centradas en el contenido?

Las redes centradas en el contenido (CCN) marcan un cambio arquitectónico en el diseño fundamental de Internet. En lugar de acceder a los datos en función de su ubicación, como un servidor, se puede acceder a ellos según su contenido. Cuando un usuario en Internet solicita los datos, se pueden recuperar de cualquier dispositivo en red que los esté almacenando, en lugar de tener que recuperarlos de una ubicación específica en Internet.

Desde sus inicios, Internet se ha centrado en la comunicación entre dispositivos fijos como las computadoras. Luego, a medida que Internet evolucionó, el foco principal de interacción con Internet, desde la perspectiva del usuario, giró en torno a la recuperación de contenido. El diseño fundamental de Internet no preveía tal uso, lo que generaba cuellos de botella y tráfico lento, a menudo atascando las redes e incluso colapsando los servidores.

Se han ideado soluciones creativas a lo largo de los años para evitar que Internet se detenga, pero esas soluciones rara vez abordan el diseño básico subyacente. Las redes centradas en el contenido cambian esa realidad. CCN está diseñado para imitar los patrones de uso de Internet, aprovechar las infraestructuras de red existentes y resolver los problemas que enfrentan los editores al distribuir información de manera eficiente para satisfacer la demanda. Este nuevo diseño arquitectónico permite que las redes se autoorganicen para que puedan entregar contenido relevante a pedido sin tener que construir redes completamente nuevas.

Sin embargo, si bien se centra en la entrega de contenido, las redes centradas en el contenido no descuidan la intención de comunicación original de Internet. Incluso la comunicación depende de que las redes recuperen y envíen información de manera eficaz. Por esa razón, CCN está diseñado para anticipar no solo las necesidades de información, sino también las interacciones necesarias para recuperar y difundir esa información. El corazón de las redes centradas en el contenido es que permite el almacenamiento en caché automatizado de datos en cualquier lugar de la red, independientemente de la aplicación del usuario final. En lugar de transmitir datos según la ubicación geográfica, la red centrada en el contenido reconoce el tipo de contenido y lo impulsa en consecuencia.

Esto significa que los editores y proveedores no tienen que almacenar datos en una ubicación en particular, como en un servidor. Todas las necesidades de datos específicas tienen un nombre específico, y cualquier dispositivo que reconozca esa solicitud de datos puede responder desde su memoria caché. Una red centrada en el contenido puede aprovechar cualquier medio disponible para adquirir y entregar contenido a los usuarios. Lleva a cabo esta tarea mediante la reestructuración de la gestión de recursos de red y la distribución de información. Esto da como resultado una red que es altamente adaptable y flexible sin tener que eliminar la infraestructura subyacente y reemplazarla con nuevos componentes.

El paradigma de las redes centradas en el contenido significa que las redes ya no se centran en centros de información, sino que la red en sí está construida con contenido consciente de sí mismo. Un usuario con una computadora portátil en marcha ya no tiene que depender de conectarse a un punto de acceso inalámbrico, navegar a un sitio web, encontrar y luego revisar o responder a un conjunto específico de datos, como una publicación de blog. En cambio, ese usuario podría simplemente rebotar en el usuario del teléfono inteligente en el mismo tren y revisar o responder a la publicación del blog en segundos. Aunque simplificado, esto explica el potencial de las redes centradas en el contenido en acción para un usuario final.