La competencia comunicativa generalmente se refiere a qué tan bien alguien es capaz de comunicarse con los demás, aunque esto se puede desarrollar y refinar aún más de varias maneras. En general, esta idea bastante simple a menudo se considera que tiene tres pasos básicos involucrados, que son planificar la comunicación, comprender cómo comunicarse y ser capaz de comunicarse. Este proceso incluye dos componentes principales: el mensaje utilizado para transmitir una idea y el significado que realmente transmite ese mensaje. La competencia comunicativa es importante para cualquier persona que desee poder comunicarse con claridad, especialmente los oradores públicos y las personas que aprenden un segundo idioma.
La idea detrás de la competencia comunicativa es que las formas en que las personas se comunican se pueden analizar y considerar con respecto a la efectividad. A menudo se considera que alguien es competente, al menos en un nivel superficial, si puede hablar con otra persona de una manera que sea apropiada y que transmita un significado de manera precisa. Sin embargo, a menudo se considera que este proceso real se compone de tres pasos básicos que ocurren en la comunicación. La planificación es una parte vital de la competencia comunicativa, ya que demuestra que alguien es capaz de pensar en la comunicación con anticipación y prepararse para ella.
La competencia comunicativa generalmente continúa con la comprensión de cómo comunicarse. Esto está estrechamente relacionado con la planificación, ya que alguien necesita comprender cómo se produce la comunicación para planificarla correctamente. De este conocimiento y planificación surge el paso final, que es el proceso real de comunicación. Esto proviene de la habilidad o capacidad para comunicarse de manera efectiva, lo que a menudo puede tener un gran impacto en el mensaje que transmite una persona, independientemente de la planificación o el conocimiento.
Durante la comunicación, la forma en que una persona se comunica a menudo se considera en dos elementos con respecto a su competencia comunicativa. El mensaje que se transmite es el contenido real que una persona habla, escribe o expresa de alguna manera. Dentro de este mensaje, sin embargo, está el significado que una persona logra transmitir. Alguien puede sentir que su mensaje expresa una idea, pero el significado real puede no coincidir necesariamente con la intención del mensaje.
La competencia comunicativa es importante para casi cualquier persona que desee comunicarse con otras personas en cualquier tipo de relación. Las discusiones y los desacuerdos a menudo se pueden evitar si las personas pueden expresar de manera efectiva el significado de un mensaje. Los políticos y otros oradores públicos a menudo buscan altos niveles de competencia comunicativa para poder transmitir significado y expresar ideas a otros de manera efectiva. Las personas que están aprendiendo un segundo idioma también tienden a enfocarse en este tipo de competencia para asegurarse de que comprenden el subtexto y varios aspectos de la comunicación dentro de ese idioma que pueden ser sutiles y complejos.