Un montacargas saca botes del agua en una plataforma alada. Esta tecnología tiene una serie de aplicaciones, que pueden incluir el reemplazo del dique seco tradicional y las técnicas de lanzamiento. Las empresas que fabrican elevadores de barcos también pueden especializarse en la instalación y mantenimiento de dichos sistemas, proporcionando un paquete completo a sus clientes. Esto a menudo es necesario para instalaciones personalizadas diseñadas para aplicaciones y ubicaciones muy específicas, donde la compañía quiere asegurarse de que el equipo esté correctamente instalado.
El dispositivo consiste en una plataforma que se puede bajar bajo el agua, lo que permite a la tripulación navegar un barco sobre él. Una vez que el barco está en su lugar, el elevador se puede activar y se levantará debajo del barco. Las cunas y los carros soportan el peso del cambio de manera uniforme y lo estabilizan a medida que se eleva por encima del nivel del agua. La plataforma vertical puede sacar la embarcación parcial o totalmente fuera del agua para permitir que los técnicos accedan a la embarcación y realicen una variedad de operaciones.
Una aplicación está en lanzamiento. Se puede construir un barco directamente sobre el elevador, y cuando sea el momento de su lanzamiento inicial, los técnicos pueden bajarlo lentamente al agua. Esto puede ser menos perjudicial que un lanzamiento más tradicional, y permite un alto grado de control para el personal en el patio. Dichos dispositivos también se pueden usar para sacar rápidamente los barcos del agua para el trabajo en dique seco. Tradicionalmente, este proceso ha requerido mover un bote a un resbalón y bombear para eliminar el agua para que los trabajadores puedan acceder al exterior.
Otro uso potencial de la tecnología de transporte de barcos es el reemplazo de las cerraduras usadas para mover barcos alrededor de canales y presas. Los cambios pueden ser más rápidos y pueden conferir otros beneficios, dependiendo de la configuración. El mismo equipo se puede utilizar para mover transbordadores, así como para construir suministros como cajones utilizados en los sitios de puentes y presas. Una vez que finaliza la construcción o las reparaciones, el elevador puede estar disponible para el tráfico de barcos.
Este equipo se basa en una serie de cabrestantes de servicio pesado que se pueden sincronizar cuidadosamente para sacar un barco del agua. La capacidad de cronometrar el elevador es muy importante, ya que un cabrestante desigual puede desequilibrar el barco y dañarlo o dañar el equipo. Los sistemas informáticos están disponibles para administrar los winches y asegurarse de que funcionen sin problemas. Los técnicos también necesitan limpiarlos e inspeccionarlos regularmente para asegurarse de que el elevador de barcos estará en buenas condiciones de funcionamiento cuando sea necesario.