Mayurasana es una pose avanzada que se usa en la forma de yoga Hatha. Se conoce comúnmente como la pose de pavo real, tomando su nombre del origen sánscrito de la palabra pavo real, mayura. En general, mayurasana se realiza cuando todo el cuerpo se mantiene paralelo al piso, mientras se levanta con los codos doblados. Las personas que realizan esta postura fortalecen los músculos del cuerpo; mejorar el equilibrio; y reducir problemas de salud, como estreñimiento y problemas de digestión.
Se necesita un poco de fuerza para sostener el cuerpo en la pose de mayurasana. Como resultado, muchos músculos del cuerpo se trabajan y se tonifican con el tiempo. Por ejemplo, los brazos soportan el peso del cuerpo, lo que hace que los músculos se definan bien. Además, el resto de los músculos del cuerpo, incluidos los de las piernas, el estómago, el pecho, la espalda y el cuello, trabajan para mantener esas partes del cuerpo paralelas al piso. En consecuencia, estos músculos se fortalecen y desarrollan también.
La fuerza es solo una parte de los muchos beneficios de realizar la pose de mayurasana. Se cree que la postura mejora la postura del yogui, permitiendo que el núcleo del cuerpo trabaje para sostener la columna vertebral y retraer los hombros. Además, se cree que mejora la digestión, previene el estreñimiento y mejora la función tanto del páncreas como del hígado.
Aunque mayurasana puede ser inalcanzable para principiantes, hay algunos consejos útiles que podrían hacerlo posible. Por ejemplo, un principiante puede querer asumir la postura, pero es posible que no tenga la fuerza para sostener las piernas y la cabeza paralelas al piso. Algunos yoguis recomiendan usar bloques de yoga o cojines para apoyar el cuerpo. A medida que la persona se fortalece, puede comenzar a quitar las ayudas, manteniendo la postura sin ayuda.
Además, los principiantes a la pose de mayurasana deben facilitarlo. Incluso si logran mantener sus cuerpos paralelos al piso, solo deberían hacerlo durante unos segundos. A medida que participan en la pose con más frecuencia, pueden mantenerla unos segundos más. Eventualmente, deberían poder mantener la pose durante 30 segundos.
La mayor parte del peso del cuerpo descansa sobre los codos y las muñecas con la pose de mayurasana. Como resultado, esas áreas del cuerpo son propensas a sufrir lesiones. Las personas con lesiones preexistentes en una o ambas muñecas o codos no deben realizar esta postura. Además, las personas con problemas de espalda o cuello deben consultar a un médico antes de mantener la postura, ya que puede empeorar tales lesiones o causar daños irreparables. Algunas personas con presión arterial alta, úlceras estomacales o hernias intestinales también deben abstenerse de realizar la pose de mayurasana.