¿Qué es la ribosa?

La ribosa es uno de los muchos compuestos orgánicos esenciales que se encuentran en el cuerpo humano, y tiene una fórmula compuesta de C5H10O5. Específicamente, es un monosacárido, que es una forma elegante de decir que es azúcar simple. Sin embargo, este tipo de azúcar no vendrá de comer ciertos tipos de alimentos; los humanos lo hacen de forma natural.

Constituye la columna vertebral del ácido ribonucleico (ARN). Cuando se fosforila, la ribosa se vuelve crítica para establecer y mantener el metabolismo. Este es un conjunto de reacciones que todo organismo vivo tiene. El metabolismo contribuye a una serie de procesos vitales críticos, que incluyen la reproducción, el crecimiento, la respuesta a estímulos externos y la descomposición de la materia orgánica en energía. Esta conexión implica que la ribosa podría estar relacionada con la producción de energía.

El hecho de que la ribosa se compone únicamente de carbono, hidrógeno y oxígeno también lo convierte en un carbohidrato, que es otro factor que sugiere que puede contribuir a la energía. Como era de esperar, esto lo hace atractivo para personas con ciertas profesiones, como atletas profesionales y culturistas. Si bien el cuerpo humano lo crea naturalmente por sí solo, es un proceso bastante lento, por lo que muchas compañías farmacéuticas han desarrollado suplementos de culturismo que contienen ribosa en forma de polvo.

Más allá del ejercicio, los médicos usan este monosacárido para tratar pacientes con enfermedades que afectan la energía. Esto incluye el síndrome de fatiga crónica, enfermedad de las arterias coronarias, fibromiaglia y más. Además, puede ayudar a frustrar los síntomas paralizantes asociados con el trastorno hereditario de deficiencia de mioadenilato desaminasa, incluida la rigidez, el dolor y los calambres después del ejercicio. Este tratamiento puede aplicarse a través de suplementos dietéticos o por vía intravenosa.

Por supuesto, con cada suplemento dietético viene su parte de posibles efectos secundarios. Si bien la ribosa suplementaria puede proporcionar una mayor resistencia, demasiada puede reducir el azúcar en la sangre. Esto es especialmente peligroso en aquellos que sufren de diabetes o hipoglucemia, y aquellos que deben someterse a procedimientos quirúrgicos. En estos casos, se recomienda evitar tomar tales suplementos dietéticos. La falta de investigación que demuestre lo contrario también significa que las mujeres que están embarazadas o que pueden quedar embarazadas deben ir a lo seguro y evitar la ribosa suplementaria.

Hay muchas otras situaciones en las que debe tener en cuenta al tomar suplementos. Por ejemplo, se sabe que la ribosa interactúa poco con el propranolol, el salsalato, el trisalicilato de magnesio clorado, la aspirina y el alcohol, porque todos estos medicamentos ya pueden reducir el azúcar en la sangre como un efecto secundario. Cuando el nivel de azúcar en la sangre baja demasiado, puede experimentar piel húmeda, hambre extrema, náuseas, taquicardia, temblor o sensación de nerviosismo. Deje de tomar suplementos de ribosa y consulte a un médico si experimenta estos síntomas.