¿Qué debo esperar de una resonancia magnética cerebral?

La resonancia magnética, o MRI, es una técnica médica de diagnóstico que puede proporcionar una imagen tridimensional de una sección escaneada del cuerpo. A menudo se realiza una resonancia magnética del cerebro para obtener imágenes claras que permitan determinar o excluir posibles afecciones médicas que estén afectando el área. Las resonancias magnéticas cerebrales generalmente son indoloras, pero pueden causar cierta incomodidad a los pacientes con claustrofobia.

Hay dos tipos principales de máquinas de resonancia magnética que se utilizan para realizar una resonancia magnética del cerebro. Una máquina estándar se verá como un tubo largo y delgado. El paciente se acuesta en una camilla rodante y se desliza hacia la máquina. Una máquina de resonancia magnética abierta es similar, pero tiene lados abiertos en lugar de un tubo. Para aquellos con claustrofobia severa, es bueno preguntar si la prueba se puede realizar en una máquina de resonancia magnética abierta. Un médico también puede recetar un sedante para aquellos con ansiedad severa acerca de los espacios cerrados.

Algunas resonancias magnéticas requieren que el paciente reciba una inyección de una solución que teñirá temporalmente el área escaneada, lo que hará que el contraste sea más fácil de ver. Asegúrese de mencionar cualquier alergia médica o alimentaria conocida, ya que la solución de contraste puede contener alérgenos. Los aparatos ortopédicos, prótesis, marcapasos y clavijas de metal en el cuerpo pueden reaccionar mal con una resonancia magnética, ya que la máquina es esencialmente un imán gigante. Asegúrese de darle al médico un historial médico completo para que pueda determinar cualquier problema potencial con una resonancia magnética cerebral.

Durante la prueba, es importante permanecer completamente quieto y seguir todas las instrucciones. El médico o el técnico de resonancia magnética generalmente se encuentra en una sala de control, pero la mayoría de las máquinas de resonancia magnética tienen un sistema de micrófono que permite que tanto el paciente como el médico se comuniquen. Cuando la prueba está en curso, el paciente puede escuchar sonidos de clic que indican que se están tomando las exploraciones. Es típica una sensación de aumento de calor en la cabeza, pero se debe informar inmediatamente de dolor, mareos o náuseas. Por lo general, una resonancia magnética del cerebro puede tardar entre 30 minutos y dos horas.

Una resonancia magnética del cerebro se puede realizar por muchas razones, tanto leves como graves. Las personas con dolores de cabeza persistentes, mareos o visión borrosa, o antecedentes de cáncer cerebral, pueden someterse a una resonancia magnética cerebral simplemente para identificar la raíz de un problema. Algunas afecciones que se pueden diagnosticar con una resonancia magnética cerebral incluyen cáncer, aneurismas, defectos de los vasos sanguíneos, hidrocefalia, meningitis o daño a los nervios ópticos. Un médico también puede solicitar una resonancia magnética después de una lesión grave o un accidente automovilístico para detectar hemorragia intracraneal u otras formas de daño cerebral.