Una marea roja es un tipo de floración de algas oceánicas que se caracteriza por un tinte rojo en el agua. Algunas de las algas involucradas en este fenómeno son perjudiciales para los peces y pueden hacer que los peces mueran. Varias especies también son peligrosas para los humanos y pueden causar síntomas que van desde molestias hasta enfermedades graves. La mayoría de las naciones vigilan sus entornos marinos para que puedan notificar a los ciudadanos cuando el agua no es segura debido a una marea roja.
Una marea roja ocurre cuando las algas naturales florecen o crecen muy rápidamente y se acumulan en una gran masa. Si bien esta masa de algas es inofensiva en muchos casos, puede parecer sorprendente porque cierto fitoplancton en la floración de algas es rojo y puede hacer que el agua cambie de color. En otros casos, la marea roja es dañina porque alberga organismos como Alexandrium tamarense y Dinophysis norvegica, que pueden liberar toxinas cuando se consumen. Los biólogos analizan el agua para determinar si la marea es peligrosa o no.
Como hemos visto, una marea roja en realidad no tiene nada que ver con las mareas. Además, una floración de algas puede ser peligrosa sin ser roja. Por lo tanto, muchos biólogos prefieren el término «floración de algas nocivas», que consideran más preciso. Debido a que el término «marea roja» se entiende y acepta comúnmente, la mayoría de las organizaciones que se centran en brindar información sobre las condiciones del océano a los consumidores continúan usándola.
Durante una marea roja, las algas tóxicas pueden envenenar a los peces, haciendo que los cuerpos se laven en la orilla. Los biólogos a menudo lo usan como indicador para estudiar la proliferación de algas nocivas. Las toxinas que matan a los peces generalmente no son peligrosas para los humanos. Sin embargo, los mariscos pueden acumular toxinas que son muy peligrosas para las personas y pueden causar afecciones como la intoxicación paralítica de los mariscos, que puede provocar la muerte si no se trata. Otros tipos de intoxicación por mariscos son comunes y tienen síntomas que van desde diarrea hasta daño neurológico.
La toxina no puede eliminarse de los mariscos a través de la cocción, la congelación o cualquier otro método. Esto significa que los mariscos cosechados durante una marea roja no son seguros para comer. Los peces de un área con una floración de algas nocivas tampoco deben consumirse, debido a la posibilidad de que puedan albergar toxinas peligrosas. Por esta razón, se recomienda encarecidamente que las personas que recolectan su propio marisco verifiquen las condiciones oceánicas prevalecientes antes de salir, y eliminen los mariscos inseguros.